Debido a que muchas personas no pudieron aplicar al primer estímulo que ya se había destinado para este fin, el alcalde Eric Garcetti puso a disposición 100 millones de dólares con el fin de beneficiar a dueños de propiedades o inquilinos en la ciudad que se han visto afectados por el coronavirus. Además, se aclaró que inmigrantes indocumentados también podrán aspirar a esta ayuda.

Una orden ejecutiva establecida por el gobernador Andrew Cuomo impide los desalojos hasta el próximo 20 de agosto. No obstante, neoyorquinos que han perdido sus empleos como consecuencia de la crisis por coronavirus, dicen que sus arrendadores no dejan de hostigarlos.

Varias familias hispanas, que no tienen un ingreso económico debido al coronavirus, sienten temor a quedarse sin hogar pese a que el gobernador Cuomo ordenó una moratoria hasta finales de agosto para que todos aquellos afectados por la pandemia no teman ser desalojados por la falta de pago del alquiler.

Muchos de ellos señalan que las deudas de rentas por los locales siguen aumentando y, sin un ingreso, temen perder todo por lo que han trabajado. Según informes locales, las industrias más afectadas son las tiendas de abarrotes, los restaurantes y las que brindan servicios de cuidado personal.

La ayuda para renta e hipotecas será a través de las organizaciones United Way, The Salvation Army y Communities In Schools. Entre los requisitos para aplicar está haber visto una reducción de sus horas de trabajo o haber perdido su empleo por el covid-19, explica Mari Reyes, del condado de Brazoria.

Los expertos aseguran que todas las ciudades en el sur de California tienen reglas distintas, pero recomienda a los comerciantes informarle siempre por escrito al propietario si tienen inconvenientes para pagar por culpa de la crisis del coronavirus, ya que existen acuerdos y plazos que evitan desalojos.