En un minuto también te informamos que en medio de la ola de acusaciones por acoso sexual que salpica a artistas y personalidades en el país, una periodista aseguró que el defensor de los derechos civiles, el reverendo Jesse Jackson, la miró de forma inapropiada y la tocó por la cintura diciéndole "quiero algo de eso”. A su turno Jackson señaló no tener nada que ver y no recordar tal episodio.

El debate surge a la luz del escándalo de acoso sexual en Springfield que involucra al senador estatal Ira Silverstein y a una reconocida activista por los derechos de las víctimas de crímenes violentos.

La organización Grassroots Leadership dio a conocer una carta de una mujer que asegura que fue víctima de amenazas y acoso sexual por parte de una guardia.

El productor gastó cientos de miles de dólares en exagentes de inteligencia que investigaban a sus supuestas víctimas y a periodistas que estaban averiguando información sobre las denuncias, según publicó The New Yorker.

Empleados de la producción que fueron molestados por el actor aseguran que los creativos mintieron al negar estar enterados de lo que había ocurrido en los sets de la serie de Netflix.

Líderes en Springfield proponen medidas ante la aparente inacción de alegaciones de acoso sexual en el capitolio estatal. Las medidas incluyen la designación de un inspector general que investigue los casos, la creación de una línea telefónica de apoyo a las presuntas víctimas y entrenamiento en acoso sexual de empleados legislativos. Estas iniciativas surgen después de conocerse presuntos casos de abuso sexual al interior del gobierno del estado que no han sido investigados.