Trump quiere que hablar mal inglés o tener un mal crédito quite puntos para obtener solicitudes migratorias
El diario The Washington Post publicó este miércoles un nuevo borrador de una propuesta de la administración de Donald Trump que busca catalogar como 'cargas públicas' a los inmigrantes que hayan usado beneficios públicos y busquen ajustar su estatus migratorio.
El plan ya había sido revelado en febrero por el medio Vox, pero el nuevo borrador arroja nuevos detalles sobre el plan, mostrando que el gobierno buscará establecer reglas que perjudiquen las solicitudes de quienes tienen mal crédito, quienes no manejan el idioma inglés y hasta quienes tienen condiciones médicas que no puedan costear.
Aunque el Servicio de Ciudadanía e Inmigración (USCIS) ya podía tomar en consideración una amplia gama de factores al considerar si un inmigrante podría convertirse en una carga pública, el borrador muestra cómo el gobierno de Trump busca ampliar las consideraciones mínimas que hacen los agentes de inmigración durante el proceso de ajuste migratorio.
En concreto, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) pide que se considere como un factor negativo el uso de beneficios públicos por parte de solicitantes de visas o de la residencia legal permanente ('green card'), haciendo más probable que quienes aprovechen estos servicios sean considerados inadmisibles al país. Esa parte del plan aparecía en el borrador filtrado en febrero por Vox, que contenía solo 26 páginas.
El nuevo borrador, que obtuvo The Washington Post y contiene 223 páginas, muestra que el gobierno también busca asegurar que quienes obtienen visas o 'green cards' tengan altos niveles de educación, sepan inglés y sean saludables, entre otras cosas.
"Un extranjero tiene un alto riesgo de convertirse en una carga pública si tiene una condición médica y no puede mostrar evidencia de tener un seguro de salud no subsidiado, o la posibilidad de obtener un seguro de salud no subsidiado, o de otros medios no gubernamentales para pagar su tratamiento", dice el documento.
El borrador también pide agregar deméritos en las solicitudes de quienes hayan sido eximidos de pagar una tarifa por un trámite migratorio. "La inhabilidad de pagar una tarifa por un beneficio migratorio sugiere una inhabilidad de ser autosuficiente", asegura el documento.
Según la administración de Trump, el propósito de las nuevas reglas es asegurar que los beneficios públicos no se conviertan en un 'incentivo' para migrar a Estados Unidos y que los inmigrantes sean autosuficientes.
El plan aún no ha sido enviado oficialmente al registro federal y no entraría en vigor hasta que eso suceda. Un portavoz del DHS aseguró al Washington Post que "cualquier borrador que circula internamente es considerado previo a la decisión (final) y no aprobado para su presentación a la Oficina de Administración y Presupuesto".
Pero otra fuente dijo al diario que el documento está completo y solo falta la firma de la secretaria de Seguridad Nacional, Kirstjen Nielsen.
La ley actual de inmigración permite que el gobierno considere cinco factores para verificar si un inmigrante podría convertirse en carga pública: su edad, su salud, su estatus familiar, sus finanzas y su nivel educativo o destrezas.
Según el borrador, el manejo del inglés "también es relevante" a la hora de determinar si alguien podría convertirse en una carga pública, pues afecta su empleabilidad: "La gente con la más baja habilidad de hablar inglés tiende a tender la más baja tasa de empleo, la más baja tasa de empleo a tiempo completo y las más bajas ganancias medias", dice el documento.
Con pocas excepciones, el nuevo documento contiene la misma lista de beneficios que figurarían como factores negativos en las solicitudes migratorias:
- los subsidios para seguros médicos de la Ley de Cuidado de Salud Asequible, conocida como Obamacare,
- la Seguridad de Ingreso Suplementario (SSI) del Seguro Social,
- la asistencia temporal para familias (TANF),
- los cupones para la comida (SNAP),
- el crédito por Ingreso del Trabajo (EITC)
- el seguro médico para niños del programa CHIP para sus hijos,
- asistencia nutricional para mujeres, infantes y niños (WIC),
- asistencia del gobierno estatal o local en efectivo,
- ciertos beneficios bajo Medicaid,
- asistencia de energía,
- asistencia de vivienda.
A contrario del borrador anterior, el nuevo documento no menciona el uso de servicios de Head Start (servicios preescolares) como uno de los factores negativos; la adición del EITC en la lista también es nueva.
Los factores negativos de alto peso en una solicitud serían: la falta de empleabilidad, el uso de al menos un beneficio público, las condiciones médicas de personas que no pueden costearlas y el haber sido considerado una carga pública en el pasado.
Un factor positivo de alto peso sería tener un salario anual que sea de al menos dos veces y media más alto (250%) que el nivel federal de pobreza.
El documento explica que la lista de factores negativos y positivos sería una guía y que los agentes pueden tomar otros en consideración: "La mera presencia de un factor enumerado no crea, por sí sola, una presunción a favor o en contra de una determinación de carga pública. Otros factores no enumerados también pueden ser sopesados en gran medida en las determinaciones individuales, según lo ameriten las circunstancias".
De ser aprobadas, las reglas sobre cargas públicas no aplicarían a refugiados o personas con asilo; cubanos que ajusten su estatus a través de la Ley de Ajuste Cubano; nicaragüenses y otros centroamericanos que ajusten su estatus a través de la ley conocida como NACARA; inmigrantes que entraron al país antes de 1972 y cumplen con los requisitos actuales para obtener la ‘green card’; y otros grupos de "poblaciones vulnerables".