FILADELFIA, PA- El Centro de Convenciones de Filadelfia se convertirá en el epicentro de la actividad electoral en la ciudad el martes a las 7 a.m., cuando cientos de funcionarios electorales comiencen a trabajar para procesar cientos de miles de boletas por correo.
Filadelfia se prepara para la 'avalancha' de boletas electorales por correo
En la ciudad más grande de Pensilvania, los funcionarios estiman que podrían tener que procesar más de 350,000 boletas de votación en ausencia devueltas de las más de 425,000 solicitadas por los votantes. A partir de las 7 a.m. del martes, los funcionarios comenzarán a procesar las boletas, organizadas por distrito, y escanearlas en busca de firmas.

Su trabajo en la ciudad más grande de Pensilvania, un bastión demócrata clave, podría ser crucial para determinar quién gana el estado de campo de batalla y, con él, la Casa Blanca.
Bajo presión para trabajar rápidamente, los funcionarios también están siendo presionados por el calendario, luego de que los republicanos que controlan la legislatura estatal optaron por no permitir que los condados comiencen a procesar las boletas por correo antes de las elecciones, como es el caso en la mayoría de los otros estados.
Ese cronograma abreviado, el potencial de desafíos legales y el gran volumen de boletas por correo en Pensilvania, que permite votar por correo por primera vez este año, podrían complicar un conteo de boletas que se espera que continúe hasta el viernes, según al máximo funcionario electoral del estado. La cantidad de personas que votan por correo solo se ha visto agravada por la pandemia de coronavirus. Pensilvania estableció un récord de la mayoría de los casos diarios el viernes con 2.398, según el departamento de salud del estado.
"Es muy difícil ser lo suficientemente rápido para satisfacer las expectativas de la gente", dijo a ABC News la comisionada de la ciudad de Filadelfia, Lisa Deeley, una demócrata que dirige la junta electoral de la ciudad. "Esto será nuevo para todos nosotros, y haremos lo mejor que podamos para hacerlo lo más rápido posible, pero sin sacrificar la precisión".
Los republicanos de Pensilvania y la campaña de Trump están sentando las bases para una campaña agresiva para desafiar la tabulación de los votos por correo, lo que podría convertir el trabajo de los funcionarios electorales en la ciudad en un punto de inflamación entre ambos partidos después del 3 de noviembre. "Docenas de personas" ya han sido enviados a Pensilvania "para monitorear la situación allí", dijo un funcionario republicano en una llamada con reporteros el viernes.
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Los residentes de Pensilvania solicitaron más de 3 millones de votos ausentes para las elecciones generales, y devolvieron más de 2 millones hasta el viernes.
En Filadelfia, los funcionarios estiman que podrían tener que procesar más de 350,000 boletas de votación en ausencia devueltas de las más de 425,000 solicitadas por los votantes.
A partir de las 7 a.m. del martes, los funcionarios comenzarán a procesar las boletas, organizadas por distrito, y escanearlas en busca de firmas. Las papeletas firmadas pasarán por máquinas de extracción, que tienen ventosas para abrir los sobres que permiten al personal retirar las papeletas en los sobres secretos internos.
Las boletas sin sobres de secreto, conocidas como boletas desnudas, se descartarán, de acuerdo con un fallo de la Corte Suprema del estado de septiembre. Pero los trabajadores electorales pueden comunicarse con los votantes y ofrecerles boletas provisionales para que las llenen en persona en un lugar de votación.
Una vez que se retiran de los sobres secretos, el personal desdobla las boletas y los 12 escáneres de alta velocidad de la ciudad las preparan para procesarlas, que pueden procesar 32,000 boletas por hora.
La ciudad planifica publicar los resultados de las boletas ausentes y enviadas por correo escaneadas el día de las elecciones después de que las urnas cierren el martes por la noche y se reciban los últimos resultados de la máquina de votación, aseguró Deeley.
Los recuentos actualizados se publicarán cuatro veces el 4 de noviembre y al menos dos veces al día el resto de la semana hasta que se cuente cada voto.
"Estoy segura de que la abrumadora mayoría será contada el viernes, si no antes", dijo a los periodistas Kathy Boockvar, secretaria de la Mancomunidad de Pensilvania.
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