Londres vivió el 22 de marzo un atentado frente al Parlamento. Recuerdo que en ese entonces escribí sobre una mujer que cayó en el río Támesis luego de que un coche embistiera a quienes paseaban por la ciudad inglesa. Andreea Cristea se había salvado y su novio también. Pero nadie sabía qué les depararía el destino y, mucho menos, cuáles eran sus planes al ir a esa ciudad.

El sumo pontífice se refirió a los ataques a dos iglesias el domingo de ramos que dejaron 49 personas muertas y al menos un centenar de heridos.

Iba a ser un día de celebración. Como todos los Domingos de Ramos, la misa en la Iglesia iba a ser una verdadera fiesta. Pero no lo fue. No lo fue para ningún cristiano. Y mucho menos fue una fiesta para Egipto. Hubo un doble atentado en dos iglesias de este país y el resultado fue completamente trágico, además de que amargó una de las más importantes celebraciones cristianas.

Rahmat Akilov, sospechoso de haber atropellado con un camión a una multitud de personas en Estocolmo, dio a conocer que pertenece al grupo terrorista EI y lamentó que el ataque solo hubiera dejado cuatro muertos.

Luego de los atentados terroristas en Egipto durante el domingo de ramos, el presidente del país declaró tres días de luto y estado de emergencia que durará tres meses, esto ante la posible amenaza de nuevos ataques en contra de la nación.

El coronel Evelio Otero, exoficial de la Fuerza Aérea de los EEUU, se refirió a los recientes ataques del presidente Trump a una base aérea siria tras presunto ataque con químicos, a los atentados terroristas en Egipto y al envío de buques de guerra estadounidenses a la península de Corea.