Dormir bien no es un hábito que podemos crear de la noche a la mañana. Para llegar a la fórmula correcta, es necesario que analicemos nuestros hábitos nocturnos y que valoremos las herramientas que tenemos a la mano para lograr combatir el insomnio.

Todo en exceso es malo. Incluso querer cuidar de tu salud puede volverse una obsesión que en lugar de ayudarte te perjudica. Estamos en la era de la información y, gracias a esto, conocemos todos esos hábitos y rutinas que pueden dañar nuestra salud.

Atravesar un día (o una semana, o un mes) estresante nos puede poner en un estado de alerta que nos persigue hasta que tocamos la almohada. Y, aunque estemos realmente extenuadas, no logramos conciliar el sueño de ninguna forma: nos damos vuelta, y vuelta otra vez, probamos dormir boca arriba, nos destapamos, nos volvemos a tapar… Irse a dormir se convierte en un trabajo cansador que debería ser todo lo contrario.

Si te despiertas con cualquier ruidito y sientes que tu sueño liviano no te permite descansar del todo, querrás conocer este poderoso té que ayudará a dormir como una piedra. La recomendación de la combinación de hierbas es de la nutricionista Fernanda Granja.

Cuando tienes problemas para dormir, piensas, tal vez, en el estrés o la ansiedad, en todo lo que te pasó en el día o en los ruidos externos que no te dejan descansar, pero quizá no te estés concentrando lo suficiente en tu dieta. Los buenos hábitos de sueño se definen desde el momento en que te levantas, y la alimentación forma una buena parte de sentirte lo suficientemente descansado al despertar.

El insomnio puede tener diferentes causas como el estrés, las preocupaciones y los disturbios del sueño. Sus consecuencias, sin embargo, son muy claras, pues se produce una marcada falta de energía durante el día y bajo rendimiento en el trabajo o en los estudios. El tratamiento, aunque a menudo necesita ser medicamentoso, puede contar con mezclas naturales como auxiliares.