A golpes, una adolescente insultaba y maltrataba a otra mientras una tercera grababa toda la agresión en video.

Todo ocurrió en China y el terrible incidente quedó grabado en cámara. El auto les pasó por encima y ambos murieron en el hospital.

Mientras las bengalas estaban encendidas, la rociaron con un spray de serpentina y la joven se convirtió en una bola de fuego.

El técnico quedó atrapado entre el elevador y la pared por varias horas, hasta que los bomberos lograron liberarlo.

El conductor llevaba la placa en el salpicadero y fue detenido por una agente de Refugio, Texas. Después de hacerle varias preguntas, el oficial llamó a la Patrulla Fronteriza. La pareja del detenido, mientras grababa el momento, gritaba que no tenían derecho a preguntar por su estatus migratorio. Una organización pro inmigrante afirmó que el hombre fue deportado al día siguiente del arresto.

Por temor a que se escapara, su familia lo encerraba todos los días en una jaula de madera. Así lo habría confesado el propio padre a medios locales.