Decenas de jóvenes se tomaron las calles de Manhattan para reclamar políticas que ayuden a detener el calentamiento global. Entre los detenidos hay dos estudiantes que participaron en la protesta y estuvieron involucrados en altercados con la policía.

El centro de la ciudad fue el escenario de una masiva marcha en la que pidieron leyes a favor de la justicia ambiental. Varios de los asistentes hablaron de la creciente problemática del cambio climático en el mundo.

Miembros de la comunidad y organizaciones defensoras de los derechos argumentaron la petición asegurando que las discapacidades físicas no deben ser impedimento para que los habitantes de Nueva York puedan hacer uso del transporte público. Los manifestantes afirmaron que el gobernador Andrew Cuomo y la MTA han mostrado interés en esta problemática.

Activistas y líderes estatales se reunirán con legisladores para discutir temas de relevancia para la comunidad inmigrante.

Los jóvenes llegaron a Albany para promover planes de educación sobre este tema, así como mayor inversión. La salud mental continúa siendo una especie de tabú entre los hispanos, mientras congresistas estatales señalan que es necesario educar a la comunidad para que sepa cómo lidiar con estas enfermedades.

La manifestación unió las voces de diversas organizaciones, activistas y asesores que reclaman directamente al gobernador Andrew Cuomo y a la dirección de la MTA la necesidad de estos ajustes, con el objetivo de que las personas que tienen movilidad reducida también puedan usar el sistema de transporte público. Demandan equidad en el uso de las instalaciones y un acceso total.