Griselda Blanco

Griselda Blanco acude a la corte pidiendo que su pena de muerte sea pospuesta, con tal de ganar tiempo y averiguar quién secuestró a Michael, su hijo menor. Con ayuda de un falso sacerdote, Griselda obtiene información que le ayudará a escapar de prisión.

Según relató Osiris, su esposo, quien era uno de los encargados de traerle cocaína a la narcotraficante, fue secuestrado en Colombia y tras recibir amenazas contra ella y sus hijos, se encontró con un hombre que la puso en contacto con Blanco. “La amenacé fuerte, le dije que, si a mi familia le pasaba algo, entonces ninguno de ellos saldría vivo (..) ella se ablandó y lo resolvió”, dijo. Mira el relato completo.

Osiris Iglesias recuerda que Miami vivió una época muy violenta por culpa de narcotraficante colombiana Griselda Blanco. Además, relata que su esposo trabajó para alias ‘La Madrina’ sirviendo para ella como uno de los lancheros encargados de transportar la cocaína.

Jorge Ayala, alias 'Riverita', fue uno de los sicarios de la narcotraficante Griselda Blanco en la década de los 80 en Miami, Florida. Además de ser su persona de confianza y pistolero favorito, era su amante. Él dice que su misión era protegerla de los enemigos, pero especialmente de ella misma.

Jorge Ayala, alias 'Riverita', en medio del juicio contra Griselda Blanco en 1998 en Miami, Florida, protagonizó un escándalo que salvó a 'La Viuda Negra' de la silla eléctrica. Él la protegió por años y la defendió, pero finalmente la traicionó.

Quienes vivieron en tiempos de la narcotraficante colombiana Griselda Blanco la recuerdan como una época sangrienta. "Hubo mucho dinero en la calle, mucho", asegura el exdetective Nelson Andreu, quien vivió en carne propia el Miami de Griselda. 'La madrina de la cocaína', como la llamaban, es señalada de haber ordenado el asesinato de más de 250 personas.