El descubrimiento de un cráneo casi perfectamente conservado tiene el potencial de transformar lo que conocemos sobre la evolución humana. Este fósil cambia lo que creíamos sobre nuestros parientes los neandertales: según este hallazgo esta especie deja de ser nuestro pariente evolutivo más cercano y su lugar lo toma el Homo longi, también apodado como Hombre Dragón.
Los humanos somos el resultado de un proceso evolutivo de miles de años. Desde la primaria se enseña que la raza humana pertenece a la especie homo sapiens y los parientes más cercanos son los neandertales, pero continuamente los científicos descubren nuevas especies.
La evolución de la especie humana tiene en su haber un montón de historias sobre descubrimientos y diferentes especies que la precedieron, entre ellas, el Homo sapiens. Pero una investigación antropológica echó luz sobre una especie que, hasta el momento, se desconocía, y que llegó a coexistir con el Homo sapiens.
Si bien los hobbits más conocidos son los de El Señor de los Anillos, hay que tener en claro que existió el homo floresiensis, también conocido por ese nombre de la mitología de Tolkien. Fue descubierto en 2003 y causó admiración por el tamaño pequeño de su cráneo y cuerpo. En ese momento se pensó que era un homo sapiens con algún tipo de enfermedad o afectado por el clima, pero lo cierto es que pronto recibió su propio nombre y caracterización.
El Hombre de Cheddar es uno de los esqueletos más enteros encontrados en Gran Bretaña y además, más antiguo. Recibe su nombre debido a que fue encontrado en la Garganta de Cheddar, en la localidad de Somerset, Inglaterra. Los primeros estudios indicaron que el hombre de 10 mil años de antigüedad estaba bien alimentado y murió sin pasar los 30 años. Ahora sabemos un poco más sobre su apariencia.
No se conoce mucho sobre los seres humanos antes del comienzo de la civilización y lo que sabemos es esencialmente una combinación de especulación y conjeturas bien fundadas. Estas son 7 muy interesantes.
Los seres humanos modernos tenemos un gen llamado MUC7 que es el que le da la capacidad a nuestra saliva de ser tan espesa y pegajosa, pero lo que no sabíamos hasta ahora sobre ella es que puede ser heredada de un antepasado fantasma del que sabemos casi nada.
La Melanesia es una zona de Oceanía que incluye países como Papúa Nueva Guinea, Vanuatu y Fiji. Hoy en día sabemos que los humanos modernos tenemos rastros genéticos de nuestros antepasados homínidos. Los pobladores de la zona deberían tener, según los científicos, ADN Neandertal y del homínido de Denisova, pero los últimos estudios encontraron también el ADN de una especie humana extinta desconocida. El objetivo de la investigación es encontrar el porcentaje exacto de genes antiguos que tenemos hoy en día, según la zona del mundo en que vivamos.
Aunque resulte muy difícil entender cómo es posible que seres humanos habiten en las regiones árticas del planeta, lo cierto es que en todo el norte terrestre, desde Alaska y Norteamérica hasta la Siberia —pasando por Groenlandia—, viven pueblos que tradicionalmente han sido llamado esquimales y a los que recientemente se les denomina inuit, término con el cual se nombran a sí mismos. Estas personas poseen condiciones físicas para enfrentar las bajas temperaturas de su entorno. Ven, pues, a conocer 7 cosas muy interesantes sobre los esquimales inuit que deberías aprender.
Somos resultado del proceso evolutivo que opera en la naturaleza a cada instante. Como el resto de las especies, nosotros, los humanos, no siempre tuvimos este aspecto ni nos comportábamos del mismo modo, eso para no decir que alguna vez ni siquiera pensábamos. Ello hace que los científicos se pregunten constantemente por qué o cómo alcanzamos las distintas adaptaciones presentes. Este artículo te propone conocer, pues, 7 enigmas sobre nuestros ancestros que aún no tienen respuestas conclusivas.
Una de las expresiones faciales más reconocibles en las personas, por muy sutil que sea, es la que refleja el enojo o el enfado como consecuencia de alguna inconformidad. Ceño fruncido, barbilla proyectada hacia adelante, movimientos evidentes de los fosas nasales, labios apretados, entre otras, son las señales más evidentes de este estado que todos los humanos hacemos sin que nadie nos lo enseñe, es puramente instintivo. ¿Te has preguntado qué sentido tiene esta expresión y por qué ha evolucionado hasta tal punto que todas las personas la hacemos parecida? Veamos que dice la ciencia.
La evolución del linaje de los seres humanos, desde su surgimiento en las planicies africanas hasta la expansión y dominio de nuestra especie, es sin dudas un tema fascinante, pero aún lleno de incógnitas y misterios sin resolver. Una de las causas por las que se hace difícil unir todas las piezas de ese complejo rompecabezas, son las lagunas que quedan en el conocimiento debido a la escasez de fósiles que se han hallado de los homínidos ya extintos. Ahora, el descubrimiento de unos extraños restos fósiles en Asia podría ayudar a despejar (o quizás complicar), lo que conocemos de nuestros orígenes.
¿Alguna vez te ha sucedido que preparas un examen durante el tiempo que supuestamente es necesario como para tener claro todo el contenido, y aún así has tenido que dejar partes en blanco al no recordar nada? Pues si así es, debes saber que esto le sucede también a otros muchos estudiantes de todo el mundo durante la dura etapa de exámenes, y suele causar una sensación de inseguridad e impotencia que, para algunos, puede ser difícil de superar. Sin embargo, por lo general esto se debe a malas prácticas de estudio, que puedes corregir sin demasiadas dificultades si te lo propones. Compartimos contigo 6 de ellas.
Aunque históricamente los seres humanos hemos vinculado nuestros sentimientos y nuestras emociones al corazón, lo cierto es que es el cerebro el órgano que dirige y controla todo lo relacionado con ello, mientras que el corazón solo refleja, con la aceleración de sus palpitaciones, lo que realmente está ocurriendo “allá arriba”.
El mundo está repleto de interesantes historias de autosuperación llevadas a cabo por personas que, por diversos motivos, han sufrido graves trastornos que han marcado su vida para siempre. En muchos casos, estos problemas fueron consecuencia de accidentes o enfermedades que han motivado en las personas el desarrollo de habilidades extremas que desafían a la imaginación, demostrando el enorme potencial del ser humano para adaptarse y sobrevivir ante duras circunstancias. Una de las historias más extraordinarias en este sentido es sin dudas la de Ben Underwood, el chico ciego que ecolocalizaba.