United We Dream advierte que el escenario tejido en el Congreso en las últimas semanas “es preocupante”, sobre todo por los recientes comentarios hechos por Trump y por el Jefe de Gabinete de la Casa Blanca, John Kelly, respecto a los dreamers (a quienes trató de vagos).

El secretario de Defensa estadounidense, James Mattis, dio a conocer que cerca de los 850 inmigrantes que prestan servicio en las fuerzas armadas o esperan el entrenamiento básico no enfrentarán el proceso de deportación.

Las organizaciones que defienden a detenidos expresaron que la policía de la ciudad ayuda a agentes de inmigración. ACLU defendió el año pasado 29 casos de este tipo en Long Island, donde hay preocupación por la presencia de la MS-13, y logró la libertad de 27 por falta de antecedentes y pruebas. Un vocero del alcalde Bill de Blasio negó las prácticas que se alegan.

El video publicado en Facebook tiene miles de vistas y comentarios que cuestionan la legalidad de estas inspecciones. Un vocero de la Patrulla Fronteriza expresó que las operaciones en los centros de transporte son un componente vital para los esfuerzos de seguridad nacional de esta agencia. La organización Amtrak aún no ha respondido a Univision sobre el caso.

El Departamento de Seguridad Nacional indicó que la disponibilidad de los servicios sería un incentivo para emigrar a Estados Unidos y que si un extranjero recibe asistencia social del gobierno, lo tiene que costear un contribuyente estadounidense. Abel Núñez, director de CARECEN, manifestó que el objetivo de la administración Trump es presentar como una carga al inmigrante.

Millones de inmigrantes indocumentados aseguran que el año transcurrido bajo el mandato de Donald Trump ha sido su peor periodo en el país. El miedo a ser arrestados es constante.