Si tiñes o decoloras tu cabello con frecuencia, es muy importante que cambies la forma en que lo cuidas. ¿La razón? Tu melena tiene nuevas necesidades y si no lo atiendes a tiempo, podrías dañarlo (además de perder el color del tinte).

Si tu cabello se siente seco y luce opaco, sin importar los productos que le pongas después de secarse; entonces es momento de actuar. Lo más seguro es que esté deshidratado y la solución a tu problema empieza en la regadera.

Los reflejos en el cabello, son una de las formas más sutiles para darle movimiento a una melena, ¡no importa el largo que tenga! Pero al ser un tratamiento químico, es muy importante que tengamos cuidados especiales para lavar, acondicionar y peinar nuestro cabello.

Con el paso de los años, nuestro cabello comienza a perder elasticidad, brillo, fuerza y suavidad. Por eso, es muy importante que adaptemos nuestra rutina de cuidado y limpieza de acuerdo a sus necesidades.

Seguro las has encontrado y no eres la única. Las puntas abiertas es una de esas cosas que las mujeres experimentamos en algún punto de nuestra vida, es inevitable. Por eso, es importante que hagamos todo lo posible para evitar que aparezcan más y asegurarnos de que no empeorar el estado de las puntas abiertas que ya tenemos (porque pueden ponerse peor).

Teñirse el cabello es toda una aventura. Las opciones de colores y técnicas producen un sinfín de opciones increíbles para cambiarnos el look. Nada que ver con los resultados que veíamos salir de los salones de belleza en los 80 y 90.