'El Chapo' llega a la prisión más segura de EEUU: estas son las condiciones de reclusión que enfrenta
Joaquín 'El Chapo' Guzmán durmió este viernes por primera vez en su nueva morada, una cárcel de máxima seguridad en Colorado que alberga a terroristas, espías y capos internacionales. El Buró Federal de Prisiones (BOP) ha confirmado que el exjefe del cartel de Sinaloa ya llegó a la prisión Florence ADMAX, donde los reos permanecen la mayor parte del día bajo aislamiento extremo.
A través de un correo electrónico, el BOP anunció que Guzmán fue sacado por la madrugada de la cárcel federal Metropolitan Correctional Center (MCC) de Manhattan, a la cual llegó desde que fue extraditado en enero de 2017, para llevarlo bajo estrictas medidas de seguridad al penal Florence ADMAX.
No se revelaron detalles sobre este traslado aéreo de costa a costa. Sus abogados informaron el jueves que su cliente ya no estaba en el penal MCC, pero hasta ahora lo confirman las autoridades.
Guzmán, de 62 años, llega a la llamada ‘Alcatraz de las Rocosas’ dos días después de que el juez federal Brian Cogan lo condenó a cadena perpetua y le impuso dos castigos simbólicos de 20 y 30 años de prisión. También le ordenó que entregue casi 12,700 millones de dólares producto del narcotráfico.
A mediados de febrero, un jurado anónimo lo declaró culpable de 10 cargos relacionados con el tráfico de drogas, lavado de dinero, uso de armas de fuego y conspiración. Su juicio duró tres meses y en éste se escucharon los testimonios de más de 50 agentes del orden, sus antiguos socios, proveedores de droga y hasta el de su amante. La Fiscalía presentó 13 cooperantes clave que trabajaron de cerca con él.
Con capacidad para más de 400 reos, la cárcel Florence ADMAX es considerada la más segura de EEUU. Nadie se ha fugado desde su apertura en 1994. Guzmán logró escapar de dos cárceles mexicanas en 2001 y 2015, pero expertos creen que es casi imposible que repita su hazaña en Colorado.
Uno de sus antiguos moradores la ha descrito como “una versión de alta tecnología del infierno”; mientras que otro la calificó como “el infierno en la tierra”. La principal queja es que los presos pasan más de 20 horas sin hablar ni ver a otro ser humano, lo cual termina por minar su salud mental y emocional, según reportes.
“El gobierno de Estados Unidos me va a mandar a una prisión donde mi nombre no va a ser escuchado de nuevo”, expresó ‘El Chapo’ poco antes de que lo sentenciaran a pasar el resto de su vida en prisión.
La unidad ‘Range 13’, la más aislada de la cárcel
El hombre que durante 30 años lideró al poderoso cartel de Sinaloa no sería un preso común en esta cárcel. Es posible que le estén reservando las celdas destinadas a los peores reos, sometiéndolo a un régimen de aislamiento que limitaría las visitas de sus hijas pequeñas y su contacto con el exterior.
Guzmán sería huésped de la ‘Unidad H’ o del sector ‘Range 13’, donde colocan a quienes están bajo restricciones especiales, las cuales impone el procurador general cuando se determina que tales medidas son “razonablemente necesarias” para “evitar la divulgación de información clasificada” o “para proteger a las personas contra el riesgo” de muerte o lesiones corporales graves.
Le iría peor si lo colocan en la zona ‘Range 13’, porque saldría menos al patio del penal (solo siete horas cada semana) y ni siquiera tendría contacto con otros presos. El resto de la población carcelaria se reúne allí en grupos pequeños o en jaulas adyacentes, lo cual les permite -al menos- conversar con alguien.
Debido a la peligrosidad y a sus dos fugas en México, se cree que el mafioso sinaloense llegaría a esa unidad, donde “el contacto con el mundo exterior es más restrictivo, ya que solo se les permite una llamada telefónica que no sea de carácter legal de 15 minutos al mes”, describe un informe de Amnistía Internacional (AI) que critica el confinamiento extremo en ese penal.
En el sector ‘Range 13’, también conocido como ‘Unidad Z’, solo hay cuatro celdas individuales, las cuales están hechas de hormigón y tienen puertas dobles. Dentro, estos espacios cuentan con una cama hecha de una losa de acero y un colchón delgado, un taburete y un escritorio de metal, un inodoro y lavado del mismo material, así como un pequeño televisor en blanco y negro. Solo pueden ver programas educativos y religiosos.
Las comidas y las duchas se toman dentro de las celdas. Las consultas médicas, incluidas las revisiones de salud mental, a menudo se realizan de forma remota a través de teleconferencias.
Una cámara montada en el techo registra cada uno de los movimientos del preso las 24 horas del día. Jamás se apaga la luz para facilitar la vigilancia. Por eso ya se quejó Guzmán mientras estaba en el penal MCC de Nueva York, alegando que no le permitía descansar por las noches.
En Florence ADMAX las celdas miden alrededor de 2.1 por 3.6 metros. Solo pueden salir con grilletes en pies y manos, y escoltados por guardias.
Estos espacios no tienen una vista del exterior y la luz proviene de una pequeña ventana en la parte superior demasiado alta para ver a través de ella. Uno de sus moradores fue Thomas Silverstein, miembro del grupo penitenciario Hermandad Aria y quien ha sido considerado uno de los presos más peligrosos en EEUU. Él murió en mayo pasado por complicaciones cardíacas. Tenía 67 años.
Alias ´Tommy Terrible’ fue el preso que más tiempo estuvo en aislamiento desde que mató a otro reo en 1983. Bajo esas medidas permaneció más de 35 años.
“Me sentí como un animal”
La ‘Unidad H’, por su parte, es igualmente un sitio duro incluso para los criminales más peligrosos.
Algunas limitaciones impuestas en ese lugar pueden eliminar privilegios administrativos. No obstante, aún tienen el derecho de recibir visitas limitadas y al menos una carta semanalmente de sus abogados y de miembros cercanos de su familia. Además, pueden recibir hasta dos llamadas telefónicas que no sean de carácter legal cada mes. Todo tipo de comunicaciones se monitorea.
En ese lugar, los reos permanecen encerrados al menos 22 horas al día y les ofrecen 10 horas de ejercicio cada semana. Salen al patio solos o los colocan en jaulas individuales, donde tienen la oportunidad de hablar hasta con cuatro presos. Pero ni en la zona recreativa pueden ver el exterior.
A lo largo de los años, varios presos en la ‘Unidad H’ se han quejado del confinamiento extremo realizando huelgas de hambre. En esos casos, el gobierno ha tomado medidas extremas: los alimenta por la fuerza. El programa 60 Minutos de CBS reportó en octubre de 2007 que más de 900 reos en ese sector pidieron un mejor trato protestando por medio de ayunos desde el año 2001.
“Me sentí como un animal, solo comiendo y durmiendo. Decidí dejar de comer para quejarme sobre el trato que me dan”, señaló uno de los presos citado en un reporte que Amnistía Internacional (AI) publicó en 2014 con el título ‘Entombed: Isolation in the US Federal Prison System’ (Sepultado: Aislamiento en el sistema penitenciario federal de Estados Unidos).
Otro reo, Mahmud Abouhalima, convicto por perpetrar el ataque terrorista en el World Trade Center en 1993 y quien fue colocado en dicha zona en 2005, también se quejó sobre su condición en ese lugar.
“Cuanto más tiempo pasé en segregación, empeoraban mis esfuerzos para sobrevivir, mantener mi estado mental y mi capacidad mental. Perdí 50 libras de peso por estar en huelga de hambre en la ‘Unidad H’ (…) Esta fue la primera vez en mi vida que experimenté la brutalidad de la alimentación forzada", relató el terrorista.
Reos con depresión, paranoia y psicosis
Amnistía Internacional tachó de una práctica “cruel y deshumanizada” del gobierno EEUU el aislamiento que se imponen en la prisión Florence ADMAX. Su informe de 2014 exploró el impacto físico y psicológico de confinar a los reclusos a celdas solitarias por entre 22 y 24 horas al día.
“No se puede sobreestimar el impacto devastador que pueden tener los largos períodos de aislamiento en el bienestar mental y físico de un preso”, dijo Erika Guevara-Rosas, directora de AI para las Américas.
La organización advirtió que las condiciones severas en ADMAX han llevado a algunos prisioneros a practicar autolesiones extremas o incluso suicidarse. El programa 60 Minutos señalaba en 2007 que al menos cuatro reos se habían quitado la vida en esa penitenciaría.
El reporte señala que los síntomas que resultan de estar aislados durante períodos prolongados son ansiedad, depresión, insomnio, hipertensión, paranoia extrema, distorsiones perceptivas y psicosis. El grupo encontró que, en promedio, los presos habían pasado 8.2 años en confinamiento.
Cita el caso de un preso con historial de enfermedades mentales que en septiembre de 2013 se ahorcó en su celda luego de haber pasado más de una década en Florence ADMAX con solo atención de salud mental intermitente. “Sufrió síntomas psicóticos que supuestamente habían sido ignorados en los días previos a su muerte”, reclamó Amnistía Internacional.
El penal del que nadie escapa
Las autoridades no han dicho en qué sector de la prisión colocarán a Guzmán. Su abogado Jeffrey Lichtman dijo el miércoles que esperaban que lo pusieran en la zona más restrictiva para prevenir que escape. Comparó que su traslado a la prisión de Colorado era “un paseo por el parque” respecto a la condena a pasar el resto de su vida tras las rejas.
“Puedes enterrar a Joaquín Guzmán bajo toneladas de acero en Colorado y hacerlo desaparecer, pero nunca van a quitar el hedor de este veredicto debido a la falla por la mala conducta del jurado en este caso”, criticó Lichtman considerando que hubo irregularidades en el juicio.
Guzmán, en tanto, se quejó por medio de una carta que leyó en la corte por las condiciones que padeció en la cárcel de Manhattan. Es posible que ese trato se repita o incluso sea peor en Colorado.
El capos aseguró que ha sufrido “una tortura” constante porque no ve la luz del día, no le permiten que lo visite su esposa Emma Coronel, bebe agua insalubre del grifo y sufre de dolores de cabeza por un ruido en su celda.
“Ha sido una tortura las 24 horas, psicológica, mental, emocional”, reclamó en una carta que leyó en el tribunal. “Es lo más inhumano que he pasado en mi vida”, agregó.
Martin Horn, profesor del John Jay College of Criminal Justice y excomisario del Departamento Correccional de la ciudad de Nueva York, dijo a la agencia Reuters que la prisión Florence ADMAX es la ideal para Guzmán.
“Está muy bien diseñada para su propósito, retener a los delincuentes más peligrosos del sistema penitenciario federal", dijo Horn.
“En sus dos fugas anteriores, Guzmán ha demostrado que puede tener un mayor riesgo de escape que cualquier otra persona. Eso hace de ADX Florence un lugar apropiado para él", añadió.
Afuera de ese penal hay una barda perimetral con alambra de púas, torres con guardias armados, patrullajes continuos y perros de ataque. Además, la zona desértica que la rodea permite que un fugitivo sea observado muy rápido.
Entre los vecinos que tendrá Guzmán están Ted Kaczynski, el terrorista apodado ‘Unabomber’; Zacarias Moussaoui, el conspirador de los atentados del 11 de septiembre; y Terry Nichols, que perpetró el atentado con bomba de 1995 en Oklahoma.
También purgan condenas Richard Reid, alias ‘Shoe Bomber’; Dzhokhar Tsarnaev, quien puso una bomba en la maratón de Boston; Ramzi Yousef, uno de los participantes en el atentado de 1993 contra el World Trade Center de Nueva York; y Osiel Cárdenas Guillén, exjefe del cartel del Golfo.
Incluso si le permiten a ‘El Chapo’ que sus familiares lo vean solo tendría derecho a un máximo de cinco visitas de hasta siete horas cada mes. Hasta tres personas a la vez podrían entrar al penal, según las reglas del BOP. En ese caso, Guzmán tendría que hacer una lista de hasta 20 familiares y amigos cercanos. Para ellos, las reglas les exigirían que no le entreguen ni reciban nada del capo, solo llevar hasta 25 dólares en efectivo, y darle abrazos y besos únicamente al saludarlo y despedirse.
Solo se permite que le tomen la mano “ocasionalmente”, menciona la página electrónica del penal.
En la limitada lista de productos que Guzmán podrá comprar por unos cuantos dólares en la tienda de la prisión hay frituras de las marcas Doritos y Cheetos, sopas Maruchan, champú VO-5, pasta dental Colgate, tortillas de harina, así como una salsa picante que vale 90 centavos.