Se estima que las variaciones en los hábitos de sueño de las personas está predeterminada de manera hereditaria y genética, y eso se puede explicar desde el punto de vista evolutivo: tiene sentido que en la antigüedad existieran madrugadores y noctámbulos, ya que en una comunidad esto permitía tener en cualquier horario del día personas despiertas y alerta ante cualquier amenaza.
En las sociedades modernas, en cambio, en las que la actividad en general y la jornada de trabajo tienen lugar durante el día, las personas noctámbulas, aquellas que prefieren ir a la cama después de la medianoche, y en algunos casos más agudos incluso alrededor del amanecer, parecen estar en franca desventaja respecto a aquellas que se van a dormir temprano y tienen todas sus energías en las primeras horas de la jornada, algo que es visto como “lo normal” y deseado para cualquier adulto promedio.
Sin embargo, ser noctámbulo trae consigo también algunas ventajas, como las que mencionamos a continuación:

#6 Pueden tener un coeficiente intelectual más alto
Un estudio realizado por un instituto científico de Londres observó que hay una tendencia a que las personas con un mayor coeficiente intelectual tengan mayores posibilidades de convertirse en noctámbulos y de realizar tareas rutinarias diarias en horas de la noche.

#5 Y mayor fortaleza física
Otro estudio, en este caso de la Universidad de Alberta en EE. UU., demostró que mientras las personas “diurnas” mantienen un nivel estable de fortaleza y resistencia física durante las horas del día, los noctámbulos tienden a incrementarla durante las horas nocturnas.
#4 Las personas que trabajan de noche tienden a ser más creativas
Varios estudios e investigaciones han sugerido que las personas con hábitos nocturnos tienden a tener una mayor creatividad y originalidad, sobre todo a la hora de enfrentarse a determinados problemas y buscar soluciones.
Esto, según una investigadora de la Universidad del Sagrado Corazón en Milán, puede deberse a que realizar actividades cuando “el resto del mundo” duerme, puede propiciar un espíritu no convencional y la habilidad para encontrar soluciones alternativas y originales.
#3 Mejores puntuaciones en test de inteligencia general
Vinculado a uno de los estudios mencionados anteriormente se encuentra otra investigación realizada por científicos de la Universidad de Madrid, para la que se tomó en cuenta los hábitos de sueño de 1000 adolescentes. Esto permitió saber que los más noctámbulos de la muestra obtuvieron mejores puntuaciones en tests de inteligencia general. De todas maneras, el mismo estudio demostró que los “madrugadores” suelen tener mejores notas en sus pruebas y exámenes curriculares.
#2 Pueden permanecer mentalmente alerta por más tiempo
Un estudio llevado a cabo por la Universidad de Lieja en Bélgica intentó establecer patrones de la actividad cerebral de las personas en función de sus hábitos de sueño. Para esto se le pidió a los participantes –15 personas “extremadamente nocturnas” y 16 “extremadamente diurnas”– que mantuvieran su hábito regular de sueño, y luego se registró la actividad cerebral de cada uno de ellos en dos oportunidades: al momento de despertarse y 10 horas después de haberse despertado.
Mientras en la primera medición ambos grupos mostraron valores similares, en la segunda, se comprobó que las personas nocturnas mantienen una mayor actividad cerebral luego de 10 horas de vigilia, en las regiones del cerebro vinculadas a la atención y al ritmo biológico.
#1 No están solos
Si bien las horas de la madrugada suelen ser las preferidas por los noctámbulos para desempeñar actividades que requieran atención o creatividad debido a la tranquilidad y la soledad que estas horas brindan, hay muchas personas que en ese mismo momento están también disfrutando de las ventajas de la noche.
Muchas figuras célebres han sido reconocidas por sus hábitos de mantenerse despiertos hasta altas horas y de trabajar de madrugada. Entre ellos, Barack Obama, Winston Churchill, Charles Darwin, Bob Dylan, Franz Kafka, Gustave Flaubert, Marcel Proust y J. R. R. Tolkien.