La semana pasada, diferentes grupos conservadores de Estados Unidos rompieron las reglas de distanciamiento social para hacer algo insólito: protestar para que se reabra el país.

Ante las manifestaciones para pedir reabrir el estado el gobernador Gavin Newsom anunció que aún no hay fecha exacta para aligerar el resguardo ni las medidas de distanciamiento social.

Miembros del grupo 'Reopen Florida' les están pidiendo a las autoridades que reactiven los espacios públicos y los negocios no esenciales. Por su parte, el alcalde Francis Suárez reiteró que el bienestar de los residentes sigue siendo la prioridad.

Un grupo de manifestantes irrumpió el Centro Médico en la zona de Río Piedras para expresar su rechazo sobre el bajo número de pruebas que se han realizado a la ciudadanía.

Recientemente el hijo de Donald Trump se quejó porque Facebook prohibió las publicaciones en Facebook de los manifestantes que el lunes acudieron al Capitolio de Sacramento para exigir la reapertura de las actividades comerciales en el estado.

Aunque ha habido sin dudas seguidores espontáneos a través de los tantísimos eventos y grupos de Facebook que están convocando estas protestas, el creciente 'movimiento pro-apertura' es cualquier cosa menos espontáneo y tiene entre sus principales promotores a grupos ultraderechistas, conservadores, ultrareligiosos, donantes influyentes y plataformas bien organizadas y con experiencia en movilizaciones.