El día tan esperado llegó. Nuestro teléfono se encendió y vimos la notificación que más ganas teníamos de recibir: la quinta temporada de House of Cards ya está disponible en Netflix. Sí, seguramente te pasó como a mí, que tuve ganas de dejar de hacer todo lo que estaba haciendo e irme corriendo a casa a poner play en el primer episodio. Pero tranquilo, antes de hacer todo eso es mejor que repasemos en nuestra mente qué fue lo último que sucedió en la temporada anterior.

A pesar de la maldad que Claire y Francis derrochan en cada capítulo de House of Cards, ambos nos lograron conquistar a su manera. Por supuesto, nadie quisiera que ellos dos fueran presiente y primera dama de verdad —aunque a veces la realidad supera la ficción—, pero como protagonistas de una serie nos convencieron.

Si bien la ansiedad por ver la nueva temporada de House of Cards es cada vez mayor, el lado bueno está en que estamos a tan solo unas semanas del estreno de los nuevos episodios a través de Netflix. La unión entre Frank (Kevin Spacey) y Claire (Robin Wright) está más fuerte que nunca, y ya nos dejaron bien en claro que son capaces de hacer cualquier cosa con tal de obtener lo que quieren. Y lo que más desean ahora es seguir en la presidencia de los Estados Unidos.

Lo hicieron de nuevo. Con motivo del estreno de la nueva temporada de House of Cards, los capos de marketing de Netflix en Argentina se despacharon con una parodia del spot «Menem lo hizo», al mejor estilo Frank Underwood.

House of Cards se transformó en la serie predilecta de Netflix en poco tiempo, sobre todo por ser con la que el servicio de streaming se lanzó a este nuevo mundo de producir contenidos originales. Estratégicamente, la fecha de estreno de la quinta temporada fue dado a conocer con un video corto en enero, el mismo día en el que el presidente Donald Trump asumía su cargo.

La viralización esta semana de una escucha telefónica a Cristina Fernández de Kirchner y Oscar Parrilli provocó una ola de comentarios en las redes sociales, no tanto por el contenido (francamente, poco revelador) de la conversación, sino por el tono con el que la ex presidenta se dirige al ex Director de la Agencia Federal de Inteligencia.