Tu piel ya no es la de antes, ¡y no es que tengas 50 años! Apenas estás en tu segunda década de vida, pero tu cutis no parece estar muy de acuerdo. En estos casos, ¡lamentarse no será de ayuda alguna! -más bien todo lo contrario-.

Cuando el acné acosa tu rostro, hay algo que casi no se puede evitar: ¡reventar los granos! Ya sabes que esto es casi un crimen para tu cutis, ¡pero cuesta tanto no hacerlo!

Escondernos siempre detrás del maquillaje no es la mejor solución. Si tu cara está roja o quizá irritada es el momento para que abordes el problema cuanto antes y mirarlo de frente. Lo primero es lo primero y deberás preguntarte por qué tienes la cara roja. ¿Hay algo que te está causando ese enrojecimiento y que estés pasándolo por alto?

La piel grasa no es solo tener algo de brillo extra o más acné, sino que se manifiesta a diario de diferentes formas, y las únicas que saben realmente de qué se trata, son las que la padecen.

Algunas se acomplejan y otras dicen que es la mejor etapa: los 40 traen muchos cambios y generan sensaciones encontradas. Es cierto que el cuerpo experimenta transformaciones profundas y la piel no está exenta a tanta revolución, pero todo depende de tu actitud para encararlos.

El paso de los años es inevitable, así como los efectos que genera en nuestra piel. No podemos evadir la aparición de arrugas pero sí podemos tratarlas.