El presidente de Donald Trump emitió en su primer día en la Casa Blanca perdones a 1,600 de sus partidarios que, algunos en varios grados de gravedad, participaron en los actos de violencia que tuvieron lugar el 6 de enero de 2021.

Se trata de uno de los tantos proyectos de ley relacionados con el tema migratorio que los republicanos de la Cámara de Representantes han vuelto a presentar este año para atacar el problema promocionado por Trump durante la campaña electoral de 2024 de la supuesta creciente criminalidad impulsada por los inmigrantes indocumentados.

De aprobarse el proyecto, sería la primera legislación en décadas en restringir los derechos de una minoría en Estados Unidos.

El proyecto lleva el nombre de Laken Riley, la estudiante de enfermería asesinada el año pasado por un inmigrante sin documentos en el campus de la Universidad de Georgia.

La prohibición abarca toda la costa atlántica y el este del golfo de México, así como la costa del Pacífico frente a California, Oregon y Washington, y una sección del mar de Bering frente a Alaska.

En una columna publicada el domingo en el diario The Washington Post, el presidente Joe Biden advirtió que lo que hizo Donald Trump hace cuatro años fue “una amenaza genuina a la democracia” que nunca debe reescribirse, pero tampoco olvidarse.