Karen Sites, de Pittsburgh, fue una de las dos personas mordidas por tiburones en la playa más popular de Carolina del Sur. Sites fue llevada al hospital, donde la operaron y culminó con cientos de puntos de sutura.

Un niño identificado como Jameson Reeder Jr. sufrió la amputación de parte de una pierna tras ser mordido por un tiburón, el pasado sábado, en Los Cayos, Florida. El mes pasado, otra menor, Addison Bethea, perdió una pierna mordida por otro escualo en aguas del estado.

Un tiburón atacó a Jameson Reeder, un niño 11 años, que estaba buceando en Los Cayos de Florida. Un buen samaritano lo llevó a la orilla y fue trasladado al Nicklaus Children's Hospital. Los médicos tuvieron que amputarle su pierna, por debajo de la rodilla.

Algunos de los presentes que vieron a los tiburones expresaron su miedo porque estos animales estén tan cerca de las playas y de las personas.

“Papá, no quiero morir”, dijo el pequeño Finley Downer, de ocho años, cuando fue agredido por los tiburones nodriza. El niño fue mordido en ambas piernas y ameritó una operación de tres horas.

La Dirección Regional de Parques del Estado de Nueva York precisó que se vieron tiburones en tres diferentes playas, por ello la decisión de cerrar por un par de horas el acceso a estos sitios.