Congresistas demócratas contraatacan y aseveran que la agenda de Trump es de nacionalistas blancos

Las cuatro congresistas demócratas pertenecientes a minorías aludidas por el mensaje de Donald Trump en el que pedía a las legisladoras progresistas inconformes con sus políticas "volver a sus países" (pese a que son estadounidenses) aseguraron que el mandatario promueve una "agenda nacionalista blanca" y prometieron que sus voces no serán silenciadas.

"Es un ataque racista a cuatro mujeres de color electas (...) Esta es la agenda de un presidente que ha llamado a la gente que viene de lugares con población negra y morena 'países de mierda'. Es la agenda de los nacionalistas blancos", dijo la congresista de Minnesota de origen somalí Ilhan Omar en una comparecencia conjunta con sus colegas Ayanna Pressley, afroestadounidense de Massachusetts, Alexandria Ocasio-Cortez, legisladora de Nueva York de origen puertorriqueño, y Rashida Tlaib, representante de Michigan de ascendencia palestina.

Las legisladoras rechazaron los ataques de la víspera del presidente Trump en las que, sin mencionarlas, les pidió que se regresaran "a sus países de origen", a los que catalogó como lugares "rotos e infestados".

Las cuatro mujeres que llegaron al Congreso en enero y que están en el ala más progresista del Partido Demócrata pidieron en su comparecencia no prestar demasiada atención a lo que consideran una "distracción" del presidente respecto a los problemas que enfrenta el país como la detención de familias en la frontera con México.

"No nos callarán"

"Los líderes débiles se centran en la lealtad a nuestro país para evitar debatir sobre políticas públicas. No puede mirar a un niño (migrante) y justificar por qué este país les está metiendo en jaulas, así que nos ataca personalmente a nosotras y me dice que debería volver al Bronx y mejorarlo", afirmó Ocasio-Cortez.

"No nos callarán", dijo por su parte la congresista afroestadounidense por Massachusetts, Ayanna Pressley.

Desde que emitiera su primer tuit el domingo instando a las congresistas estadounidenses a regresar a su país, muchas han sido las voces que han tildado el mensaje del mandatario de xenófobo y racista y han pedido al presidente que se disculpara con las aludidas. Pero el Partido Republicano, en su mayoría, ha permanecido en silencio.

Por su parte, el presidente Trump, lejos de dar marcha atrás con sus declaraciones, continuó este lunes con la arremetida contra las representantes a las que catalogó como "radicales de izquierda" y les pidió que se disculparan con Estados Unidos, con los israelíes y con la oficina del Presidente "por el repugnante lenguaje" que, dice, han usado.

"Nunca seremos un país socialista o comunista. ¡SI NO SON FELICES AQUÍ, SE PUEDEN IR!", escribió Trump este lunes. "Es su elección. Esto se trata de amar a nuestro país. Hay gente que ODIA a nuestro país".

En declaraciones a los medios, Trump fue especialmente crítico con Ilhan Omar, la única de las congresistas a las que ha atacado que no nació en el país, sino en Somalia, de donde llegó como refugiada cuando era adolescente.

El presidente aseguró de ella que viene de "un Estado fallido", que dice "cosas horribles" de Israel y la que acusó de apoyar al grupo terrorista Al Qaeda.

"Estos son los planes de los nacionalistas blancos. Se debaten en chats en Internet y ahora han llegado al jardín de la Casa Blanca", afirmó Omar, quien prefirió no hacerse eco de las acusaciones no fundamentadas del presidente.

La polémica llevó a la líder de la mayoría demócrata en la Cámara Baja, Nancy Pelosi, a preparar una resolución para condenar formalmente las declaraciones de Trump, e instó a los republicanos a denunciar sus "tuits xenófobos".