Anuncian diálogo entre el gobierno venezolano y la oposición tras reunión de Maduro con el Papa

El gobierno de Venezuela y la oposición acordaron este lunes iniciar un diálogo para buscar salida a la que ya es considerada la peor crisis política y económica que experimenta el país en décadas. Ocurre horas después de que la violencia llegó al propio Palacio Legislativo en Caracas, donde la mayoría opositora decidió activar un juicio político contra el mandatario.

El anuncio lo dio a conocer el enviado del papa Francisco, Emil Paul Tscherrig, nuncio apostólico en Argentina, tras una reunión del mandatario venezolano, Nicolás Maduro, con el pontífice en el Vaticano, un encuentro que no había sido anunciado y en el que la Santa Sede mostró nuevamente su interés en ofrecer su ayuda para salvar las profundas diferencias que existen entre la oposición y el gobierno.

"Hoy se ha iniciado el diálogo nacional durante un encuentro entre representantes del gobierno y de la oposición, con el propósito de establecer las condiciones para convocar una reunión plenaria en la Isla de Margarita el día 30 de octubre", aseguró el emisario en conferencia de prensa.

"Valentía" y "diálogo sincero"

El Papa urgió a Maduro "tomar con valentía el camino de un diálogo sincero y constructivo" para aliviar el sufrimiento del pueblo venezolano, especialmente de los pobres, según un comunicado del Vaticano. También pidió al mandatario venezolano promover un clima de renovada cohesión social que permita a todos ver el futuro con esperanza.

Monseñor Emil Paul Tscherrig, quien será el mediador de las conversaciones, manifestó que el encuentro "ha transcurrido en un clima de respeto, cordialidad y voluntad política para hacer avanzar este proceso".

El inicio de un diálogo en Venezuela es promovido por la Secretaría General de Unasur y tres expresidentes: el expresidente del gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero, el exmandatario dominicano Leonel Fernández y el ex jefe de Estado panameño Martín Torrijos.

Poca información

El encuentro, que no estaba previsto en la agenda oficial, transcurrió de forma privada y es poca la información que ha trancendido, apenas el ministro de Información de Venezuela, Ernesto Villegas, confirmó la reunión en un tuit sin dar mayores detalles.

Al término de la reunión, el mandatario publicó también a través de su cuenta de Twitter un mensaje en el que celebraba el inicio de un diálogo con la oposición.

Oposición pide "transparencia"

La alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) pidió en un comunicado emitido horas después del anuncio, que el diálogo sea público y se celebre en Caracas en vez de en la isla de Margarita.

"Exigimos que cualquier proceso de encuentro debe realizarse en Caracas, de cara a la opinión pública, manteniendo una comunicación fluida y transparente con todos los sectores del país", señaló la MUD, que celebró la participación del Vaticano en la mediación, tal y como habían propuesto.

La MUD subrayó que el diálogo debe basarse en cuatro objetivos que consideró "fundamentales": respeto al derecho al voto, libertad para los presos políticos y regreso de los exiliados, atención a las víctimas de la crisis humanitaria y respeto a la autonomía de los poderes.

Por su parte, el secretario ejecutivo de la MUD, Jesús Torrealba, consideró que "en medio de una situación como esta, es un bálsamo para todos los venezolanos la presencia del enviado personal del Papa Francisco", indicó en unas declaraciones recogidas por Reuters.

"Son momentos muy tensos para el país, muy rudos", agregó.

Asalto a la Asamblea Nacional

Este fin de semana Caracas fue centro de protestas e incidentes violentos en la sede de la Asamblea Nacional, donde la mayoría opositora votó a favor de iniciar un proceso de juicio político contra Maduro, además de declararse "en rebeldía".

La decisión se produjo luego de que las autoridades electorales anunciaran la semana pasada que el proceso de referendo revocatorio del mandato de Maduro quedaba suspendido por decisiones de juzgados locales que pusieron en duda la transparencia en la recolección de firmas, pedidas por ley para activar la consulta popular contra la permanencia o no del presidente en el poder.

La Iglesia católica ha mostrado su interés en mediar en la crisis en Venezuela, marcada por una fuerte escasez de productos de primera necesidad, alta inflación y un control de cambio férreo en medio de la caída abrupta de los precios internacionales del petróleo, que representa casi la totalidad de los ingresos del país.

En medio de este clima de tensión, el presidente Maduro inició una gira por Medio Oriente, justamente con el fin de consolidar el respaldo a la decisión de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) de recortar su producción para apuntalar los precios, que en estos días promedian los 50 dólares el barril.

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