Las autoridades revelan nuevos detalles de la investigación sobre la muerte de Andrés Guardado

Autoridades que investigan la muerte de Andrés Guardado, el joven agente de seguridad de 18 años que fue abatido de seis disparos, cinco de ellos por la espalda, por parte de un agente del Sheriff del condado de Los Ángeles, dijeron que la pistola que recuperaron en la escena tenía el ADN del joven latino en el gatillo, el guardamonte y el cargador del arma estaba cargada.

Chris Marks, comandante del Sheriff del condado de Los Ángeles, hizo la anterior revelación durante una conferencia de prensa este miércoles en el Salón de Justicia del centro de Los Ángeles.

Marks indicó que los agentes Miguel Vega y Christopher Hernández, que están involucrados en la muerte de Guardado frente a un negocio de reparación de automóviles en la ciudad de Gardena, al sur de Los Angeles, habían ido a ese lugar para investigar un tiroteo no fatal que ocurrió el 7 de junio, que no está relacionado con el joven latino.

Al discutir la investigación criminal del caso Guardado, el comandante Marks estableció que la víctima vestía uniforme o ropa de guardia de seguridad el día que le dispararon y no tenía licencia de seguridad de California.

"Aún no tenía 21 años; por lo tanto, no podía ser legalmente empleado como guardia de seguridad armado”, dijo Marks. “Ninguna persona entrevistada ha admitido hasta la fecha haber contratado al señor Guardado como guardia de seguridad en el lugar”.

Sin embargo, la familia de Andrés Guardado ha asegurado que él trabajaba de manera informal como guardia de seguridad para un taller de carrocería en el área, y, de hecho, esperaba aquel día la hora de entrada a su trabajo, mientras conversaba con una chica en el interior de su automóvil.

Marks dijo las cámaras de seguridad incautadas por investigadores en la zona de la tragedia no contenían imágenes del tiroteo.

La autopsia practicada al cuerpo de Andrés Guardado reveló que sufrió cinco balazos por la espalda y otro que penetró en su cuerpo por un costado del hombro derecho.

“No hay ninguna grabación de video”

El comandante Marks dijo que, tras la balacera del 7 de junio, los detectives habían incautado la memoria de un DVR, que se había conectado a las cámaras de seguridad, y mostró un video de ese crimen, dijo el comandante Chris Marks.

“Entonces ese DVR que grabó todo, a partir del 7 de junio dejó de grabar, porque le quitamos la memoria”, dijo Marks. “Entonces no hay ninguna grabación del tiroteo que involucra al agente y que ocurrió una semana y media después”.

El tiroteo del 7 de junio ocurrió cuando la gente se manifestó frente a una empresa que aparentemente tenía la intención de comprar gas de óxido nitroso, dijo Marks.

“Se realizaron varias detenciones en relación con el tiroteo anterior y los detectives incautaron armas de fuego, narcóticos y dinero”, dijo Marks. “Había un patrón de conducta criminal conectada con el negocio, que se remonta a varios años atrás”.

Sin embargo, hizo hincapié en que no se conocía ninguna conexión entre ese incidente y el asesinato de Guardado.

Andrés Guardado murió en un callejón sin salida a donde le persiguieron los agentes Migue Vega y Christopher Hernández. Vega fue el único que descargo su arma.

Tras el tiroteo, detectives del Sheriff del condado de Los Angeles entregaron una orden a una empresa de alarmas para que les entregaran videos, pero sus servidores no contenían ninguna grabación.

Tanto Vega como Hernández ya fueron entrevistados para dar a conocer su versión de los hechos a investigadores de homicidios del Sheriff y respondieron a sus preguntas, “pero no hay información para darla a conocer”, dijo el comandante Marks.

La investigación criminal sobre el tiroteo de Guardado está en curso, y los resultados no se harán públicos hasta que se envíen a la oficina de Jackie Lacey, la fiscal del condado de Los Ángeles para revisión.

La investigación por parte del departamento del alguacil no se iniciará hasta que haya concluido la investigación criminal.

Buscan información de teléfonos y redes sociales

Las autoridades mostraron un video de seguridad que muestra el lado opuesto de la calle donde se ubica el negocio donde los alguaciles confrontaron a Andrés Guardado y mostraba a un automóvil Lexus Blanco que se detuvo cerca del muchacho.

Cuando los oficiales detuvieron su patrulla, Guardado salió corriendo de su vehículo en dirección a un callejón sin salida y fue perseguido por los dos agentes.

El comandante Marks dijo que los investigadores están buscando a los ocupantes del Lexus, e instó a cualquier persona con información sobre el caso a llamar al Departamento de Homicidios del Sheriff Bureau al 323-890-5500.

Marks dijo que se han entregado órdenes de registro “para obtener información desde teléfonos y cuentas de redes sociales relacionadas con el incidente”, pero las autoridades están a la espera de los resultados sobre la emisión de dichas órdenes judiciales.

El 18 de julio, el FBI anunció que revisaría el asesinato y el jefe del alguacil, Alex Villanueva, ha dicho que la División de Derechos Civiles del FBI se reunió con investigadores de homicidios para comenzar a revisar la investigación.

El 10 de julio, en contra de los deseos de Villanueva de poner una “restricción de seguridad” a los resultados de la autopsia al cuerpo de Guardado, el médico forense Jonathan Lucas la hizo pública y dictaminó la muerte de Guardado como un homicidio.

Activistas muestran su desconfianza

“Desde el principio yo dije que el asunto de si tenía o no pistola Andrés Guardado no es lo más importante”, dijo a Univision Noticias, Najee Ali, presidente del Proyecto de Derechos Civiles Islamic Hope de Los Angeles. “Él fue ejecutado injustamente por un agente del alguacil; creo que el Departamento del Sheriff es responsable de este asesinato, pero continúa tratando de encubrirlo”.

Jaime Peñate, miembro de la Confederación Centroamericana (COFECA), dijo a Univision Noticias que, ante el anuncio de que las autoridades encontraron el ADN de Andrés Guardado en su pistola y el hecho de que no hay imágenes de video del tiroteo “aquí hay gato encerrado, porque nadie puede imaginar por qué a meses de que sucedió el asesinato apenas están dando a conocer estas supuestas evidencias”.

“Las manifestaciones que hemos realizado en contra de la violencia y la brutalidad policiaca surgieron en contra de la discriminación racial institucional”, añadió. “Esta brutalidad viene de décadas y se ha fomentado con el presidente en turno, de modo que pienso que no habrá justicia para Andrés Guardado”.

Abogado de la familia reacciona

En respuesta a la actualización del LASD sobre la investigación de Andrés Guardado, Alan Shea, el abogado de la familia dijo que la conferencia de prensa del comandante Chris Marks “no hizo nada para explicar a la familia, ni al público, por qué Andrés Guardado recibió cinco disparos en la espalda por parte del agente Miguel Vega. El intento del Departamento de complicar y seleccionar los hechos para crear una narrativa que vincule la muerte de Andrés con incidentes delictivos anteriores cerca de la tienda (donde trabajaba) no es más que un intento de justificar el asesinato de este joven”.

El abogado expresó que la familia Guardado ha esperado durante casi dos meses respuestas sobre la investigación de LASD sobre la muerte de Andrés y se les ha dicho repetidamente que no se liberará nada para no poner en peligro la investigación en curso.

Criticó que, en cambio “fuimos testigos del intento velado de LASD de desviar las noticias de su propia banda interna de ayudantes del sheriff en su estación de Compton conocidos como los "Verdugos" que han aterrorizado a la comunidad durante demasiado tiempo. Seguiremos buscando la verdad sobre la muerte de Andrés y no descansaremos hasta que los responsables sean llevados ante la justicia”.

Por su parte, Adam Marangell, abogado que representa al alguacil Miguel Vega, dijo en una declaración por escrita enviada a Univision Noticias: “Esperamos que se disipe la afirmación imprudente y errónea de algunos de que el señor Guardado no poseía un arma de fuego esa noche (del 18 de junio)”.

Añadió que, “de hecho, la pistola que el Sr. Guardado poseía ilegalmente era una “pistola fantasma”, ya que no estaba registrada y no tenía número de serie. Si bien la muerte del Sr. Guardado es, por supuesto, trágica, esperamos que a medida que se publiquen más hechos reales se desarrolle una imagen más completa que muestre que las acciones del alguacil Vega fueron, sin embargo, completamente justificadas”.