SAN JOSÉ, California. – Los dueños y empleados de restaurantes, barberías y salones de manicura recibieron como un balde de agua fría la noticia de que cinco condados del Área de la Bahía implementarán de manera anticipada un toque de queda regional que los obligará una vez más a cerrar sus puertas.
"Apenas nos estábamos recuperando": el toque de queda pone a restaurantes y barberías al borde de la quiebra
A partir del domingo cientos de salones de belleza y barberías en cinco condados del Área de la Bahía deberán cerrar sus puertas, mientras que a los restaurantes solo se les permitirá vender comida para llevar.
Por:Univision
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La industria restaurantera y de servicios de cuidado personal han sido dos de las más golpeadas desde el inicio de la pandemia, y justo cuando esperaban recuperarse con las ventas de fin de año, las nuevas restricciones los obligarán a limitar su operación o cerrar en su totalidad.
“La verdad la noticia devastadora. Podríamos decirle que si hay un nuevo cierre no sé qué vamos a hacer, y más en esta temporada que esperábamos recuperarnos”, dijo John Alonso Rodríguez, empleado de un salón de belleza en San José.
En una conferencia de prensa conjunta, los condados de Alameda, Contra Costa, Marin, San Francisco y Santa Clara, así como la ciudad de Berkeley, informaron este viernes que en las próximas 48 horas comenzarán los cierres de todos los sectores no esenciales como los bares, viñedos, barberías, salones de belleza y servicios de cuidado personal, entre ellos las salas de masaje, manicura y estudios de tatuajes.
“Es verdaderamente preocupante porque muchos de nuestros negocios apenas se estaban recuperando y ahora con esta nueva orden van a tener que cerrar completamente”, señaló Jesús Flores, presidente de la Fundación de Negocios Latinos de Silicon Valley.
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En una situación de precariedad similar se encuentran los restaurantes, a quienes el toque de queda regional solo les permitirá vender comida para llevar, tal cual ocurrió al comienzo de la pandemia de coronavirus. Para colmo, muchos de ellos habían invertido sus pocas ganancias del año para realizar adecuaciones y poder ofrecer servicio al aire libre.
“Los ‘biles’ se siguen pagando, la renta no perdona ni la electricidad y todas las utilidades. Los ‘taxes’ igualito se siguen cobrando, así que lo único que nos queda es confiar en nuestra gente que nos siga apoyando”, señala Carlos, dueño de un restaurante en el condado de San Mateo, que junto a Napa, Sonoma y Solano decidió mantener las restricciones de la fase morada y no unirse a los cierres adicionales a los que obliga el toque de queda regional.
El cierre masivo de negocios y las restricciones adicionales para ciertas actividades se hará de forma escalonada dependiendo el condado y comenzará a partir del domingo a las 10 pm en Contra Costa, San Francisco y Santa Clara; seguido por Alameda y Berkeley el lunes a primera hora, y Marin el martes 8 de diciembre al filo del mediodía.
El toque de queda regional estará vigente en los cinco condados de la región hasta el próximo 4 de enero, periodo que puede dejar en la ruina a familias enteras que dependen de esos ingresos para sobrevivir.
“Estamos bastante preocupados porque aquí en el salón trabajamos más de seis familias. No sé qué va a ser para estas navidades sin un trabajo. Pueden ver la peluquería, está totalmente vacía el día de hoy y no hemos cerrado. Aún así es bastante triste la noticia”, advierte Lucy, dueña de un salón de belleza en el sur de la Bahía que lleva su nombre.
