¡Avada kedavra!

La serie Hannibal tuvo un final amargo, cancelada por bajos ratings después de tres temporadas, pese a que había crecido hasta convertirse en una de las más elogiadas y queridas de la televisión.

Se aproxima la temporada 3 de Better Call Saul a la pantalla de AMC, con lo que las expectativas y el entusiasmo ha ido creciendo en torno a la serie continuadora del legado de Breaking Bad, su hermana menor no tan impactante y espectacular pero igual de brillante y seductora.

Ya a nadie le cabe dudas de que Logan fue la película de superhéroes definitiva —por más que le pese a Deadpool—: el excelente guión, la crudeza de las escenas y, sobre todo, la humanidad de los personajes la convirtieron en una verdadera joya para los amantes de las adaptaciones del cómic al cine.

Mighty Morphin Power Rangers llegó a la televisión en 1993, trayendo consigo esa inconfundible estética bizarra que combina imágenes de series japonesas con audios e imágenes agregadas, y a sus coloridos héroes adolescentes, ahora íconos de aquellos gloriosos 90.

Después de los explosivos acontecimientos (literal y figuradamente) del final de temporada anterior, y de cara a la recta final de la serie, el estreno de la temporada 7 de Game of Thrones, que además se ha demorado por la llegada del invierno a Westeros, se ha convertido en un acontecimiento enormemente esperado y anticipado, mucho más que en otras temporadas.