Este lunes inicia el segundo semestre escolar en las Escuelas Públicas de Chicago (CPS) y, por ahora, cerca de 350,000 estudiantes deberán seguir educándose desde sus casas debido a la pandemia del coronavirus. El sindicato de maestros (CTU, por su sigla en inglés) dio a conocer recientemente los resultados de una encuesta realizada a padres de familia para saber qué opinaban sobre el regreso presencial de sus hijos a clases y esto revelan los datos recolectados.

Los distritos escolares de ambos condados suspendieron su educación virtual y presencial, incluyendo las clases para adultos y actividades deportivas. Por su parte, la Arquidiócesis de Miami anunció la suspensión de clases en planteles católicos. FIU también canceló sus actividades académicas.

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El reporte anual del Departamento de Educación indica que los pequeños con discapacidades no pudieron recibir los recursos que necesitan debido a la pandemia, lo que ha afectado su aprendizaje. La organización Advocates for Children pide a las autoridades escolares identificar qué alumnos no los recibieron y desarrollar un plan con servicios compensatorios para ellos.

El sindicato de maestros de las escuelas públicas en Chicago (CTU, por su sigla en inglés) espera que se aprueba una orden judicial para que no se reabran los planteles educativos y los alumnos de educación especial no tengan que retomar las clases presenciales en medio de la pandemia del coronavirus.

A partir de este lunes, los padres de familia y los alumnos que estudian de forma remota tendrán dos semanas para decidir si quieren hacer el cambio para que vayan a clases en persona. Por el momento, hay 280,000 estudiantes en clases presenciales, pero el alcalde Bill de Blasio quiere que sean muchos más.