Lubby Navarro, miembro de la Junta Escolar de Miami-Dade, explica que las estadísticas que arroje el conteo nacional van a permitir a las autoridades federales estimar y establecer el presupuesto para cada estado, ciudad o área. Agrega que los fondos para carreteras, viviendas, escuelas y programas sociales dependen de cuántas personas viven en la zona y que esto solo se sabe a través del censo.

A pesar de que la Corte Suprema dictaminó que el cuestionamiento no puede ser añadido por ahora en el registro nacional, hasta que el gobierno presente mejores motivos, el presidente Trump advirtió que podría emitir una orden ejecutiva para lograr su cometido. Activistas aseguran que si la pregunta es agregada muchos no participarían por temor a ser deportados.

El mandatario también se refirió a la pregunta de ciudadanía en el Censo 2020, dijo que "estamos pensando en una orden ejecutiva" para poderla incluir. De acuerdo a organizaciones proinmigrantes, el forzar la introducción de este cuestionamiento en el registro nacional generaría que más de nueve millones de personas no participen, lo que representaría menos dinero en programas federales y menos representación política para los hispanos.

Donald Trump aseguró que está considerando la posibilidad de una orden ejecutiva para que el polémico punto se incluya en los formularios, luego de que la Corte Suprema devolviera el asunto a tribunales inferiores. Abogados del gobierno también indicaron que exploran opciones legales.

La semana pasada la Corte Suprema devolvió el caso a cortes inferiores porque consideró que la administración Trump no explicó correctamente los motivos por los que quiere incluir esa pregunta en el censo. Los abogados del gobierno informaron que buscan la manera de meterla en el cuestionario.

El gobierno considera aplicar dicha medida, luego de que la Corte Suprema no hallara argumentos suficientes que justifiquen la inclusión del interrogante.