La ciudad de Nueva York asegura que con el toque de queda en cuatro albergues para migrantes se busca “priorizar la salud y la seguridad” de los inmigrantes que están bajo su cuidado y de los neoyorquinos que viven en los alrededores de los refugios. Esta medida impactaría a cerca de 2,000 solicitantes de asilo.

Se venció el plazo de los 60 días de permanencia en los refugios y cientos de personas solicitantes de asilo empezaron a ser desalojadas de esos lugares en NYC. “Les pedimos a las familias que ya tienen aquí meses o hasta más de un año y que están en nuestros albergues y nuestros hoteles que nos apoyen y hagan espacio para las personas que vienen llegando”, manifestó Manuel Castro, comisionado de la Oficina de Asuntos del Migrante.

"Es estresante no saber qué va a pasar", señala una migrante embarazada que debe salir de uno de los albergues de 60 días proporcionados por la ciudad de Nueva York. Aunque los desalojados pueden volver a aplicar para ingresar a un refugio, temen por su situación inmediata, especialmente quienes tienen niños. Puedes ver en ViX más noticias gratis.

Este fin de semana un hombre venezolano murió apuñalado en un refugio del Bajo Manhattan. Ante situaciones como esta, otros inmigrantes temen por su seguridad ya que manifiestan que no hay controles estrictos en los albergues y que cualquiera puede entrar con un arma. El alcalde de Nueva York, Eric Adams, aseguró que ha pensado en poner detectores de metal, instalar cámaras y establecer nuevos códigos de conducta en estos lugares.

Debido al descenso de temperaturas que se registrarán en las próximas horas, el condado de Volusia anunció que habilitó la sede del Neighborhood Center of West Volusia, Halifax Urban Ministries y el Rock Transformation Center para albergar a las personas que necesitan refugiarse del frío. Estos centros estarán disponibles desde el 29 de diciembre hasta el 30 de diciembre.

Este miércoles la comunidad realizará una vigilia en honor a Jean Carlos Martínez, de 5 años, quien falleció tras sufrir una emergencia médica. El pequeño se refugiaba en un albergue de Pilsen cuando reportó que se sentía mal, pero se desconoce la causa de su muerte.