La marihuana es una combinación de hojas, tallos y brotes triturados de la flor de la planta Cannabis sativa. La marihuana puede ser fumada, comida, vaporizada e incluso consumirse por vía tópica, pero la mayoría de las personas la fuman.

Una mala información puede ocasionar grandes perjuicios: esto es lo que sucede en personas que comenzaron a consumir bebidas light o de dieta con la idea de que además de no engordar, podrían disfrutar de un refresco apetitoso y más saludable que el azucarado.

Cuando hablamos de adicciones no nos referimos solamente al chocolate, el café o la comida chatarra, sino a comportamientos y sustancias peligrosas, como las drogas y el tabaco. Lo bueno es que a medida que avanzan las investigaciones, surgen mayores pruebas de que el ejercicio cardiovascular desempeña un papel importante en el tratamiento de la adicción, y puede reducir la inclinación a experimentar con estas sustancias.

Nadie discute que las drogas son malas. Pero, no todos tenemos consciencia de que hay sustancias igualmente nocivas que consumimos o actividades que practicamos todos los días –y que son tanto o más adictivas que las drogas más temidas.

Quizá si escuchas el término Oniomanía no reconozcas este trastorno, pero en cambio si te hablo del síndrome del comprador compulsivo seguro sabes o tienes alguna idea de qué se trata. La realidad es que un comportamiento que muchos critican y otros tachan de consumista puede ser considerado una enfermedad adictiva que requiere de tratamiento.

En el mundo actual, las drogas autorizadas por la ley y las ilegales corren de forma paralela entre jóvenes y los que ya no lo son tanto. Conoce algunos efectos que provocan las drogas de mayor consumo en una sociedad dividida entre aquellos que hacen lo posible por estar cada día más saludables, y los que aunque quisieran no pueden porque están inmersos en una espiral adictiva de la que les es muy difícil salir.