Detenidos en Túnez tres yihadistas vinculados a la célula terrorista del atacante de Berlín

Tres presuntos yihadistas vinculados al sospechoso tunecino del atentado de Berlín, Anis Amri, fueron detenidos el viernes, anunció este sábado el ministerio de Interior de Túnez.

Según un comunicado, los tres sospechosos, entre ellos el sobrino de Amri, son miembros de una "célula (...) vinculada al terrorista Anis Amri que cometió el ataque de Berlín" y que fue ultimado el viernes en Milán en un tiroteo con la policía italiana.

El ministerio explicó que Amri había jurado lealtad a la organización terrorista Estado Islámico a través de un video. El sobrino habría contado que Amri le había mandado dinero a través de correo postal y bajo una identidad falsa para que pudieran reunirse en Alemania. Además, según el ministerio, confesó que se mantenían en contacto a través de la aplicación encriptada Telegram "para escapar de la vigilancia policial".

Según el joven, su tío era el "emir" de un grupo yihadista en Alemania, conocido como la brigada "Abu al Walaa", refiere la agencia AFP.

Los tres detenidos están en edades entre los 18 y 27 años y la célula a la que pertenecen está activa en Oueslatia, una ciudad del centro del país donde vive la familia de Amri, y Fouchana, al sur de la capital, informó el ministerio de Interior.

La muerte de Amri puso fin a una persecución que se extendió por toda Europa.

La policía italiana aseguró que el yihadista atravesó Alemania, Francia y entró a Italia después del ataque, y que realizó tramos del viaje por tren. Las autoridades francesas no comentaron sobre el tránsito por su país, que ha fortalecido sus medidas de seguridad en las vías ferroviarias tras los recientes ataques en París y Niza.

Amri no tenía ni papeles de identificación ni teléfono celular, solo una navaja y la pistola calibre .22.

En España también se investiga el caso, pues los servicios de inteligencia han establecido una posible conexión vía Internet entre Amri y un español el 19 de diciembre, explicó el ministro de Interior, Juan Ignacio Zoido, a la estación de radio COPE este sábado.

El primer ministro italiano, Paolo Gentiloni, elogió a los dos jóvenes policías que abatieron a Amri en una revisión rutinaria de papeles de identificación cuando el individuo estaba solo frente a una estación desierta. Pero al mismo tiempo hizo un llamado a mejorar la coordinación transfronteriza, al parecer expresando cierto desencanto porque la política europea de fronteras abiertas permitió a Amri viajar por tantos países a pesar de ser el hombre más buscado del continente.

Amri, de 24 años y quien estuvo preso en Italia, fue frenado por los dos oficiales que hacían patrullaje de rutina en el suburbio de Sesto San Giovanni, en Milán, la madrugada del viernes. Cuando se le pidió mostrar sus documentos sacó una pistola de su mochila, disparó y murió en el tiroteo.

Fue identificado por las huellas dactilares proporcionadas por Alemania.

El grupo extremista Estado Islámico se atribuyó el ataque ocurrido el lunes en la iglesia Kaiser Wilhelm de Berlín, donde un camión embistió un mercado navideño matando a 12 personas y dejando heridas a 56. También se atribuyó el tiroteo en Milán.

En Berlín, la canciller Angela Merkel dijo que ha ordenado una investigación exhaustiva en torno a todos los pormenores del caso, ante reportes de que las autoridades alemanas llevaban meses vigilando a Amri por sospecha de que estaba planificando un ataque.

"Podemos sentir cierto alivio ahora que hemos acabado con una situación peligrosa, pero el peligro del terrorismo sigue vigente como lo ha estado durante años y eso lo sabemos todos", dijo Merkel.

Milán, Roma y otras ciudades han intensificado sus medidas de seguridad tras el ataque en Alemania, y se han despachado más patrullas y controles de vigilancia.