El hombre al que la fiscalía señalaba como el 'líder' del grupo armado que asaltó el consulado de EEUU en Bengasi, durante la insurrección antigubernamental en Libia en septiembre de 2011, fue exonerado de 14 de los 18 cargos que se presentaron en su contra, incluyendo las acusaciones más graves.
Declaran inocente al hombre acusado de ser el líder del ataque en el que murió el embajador de EEUU en Libia
Un jurado en Washington DC determinó que Ahmed Abu Khataka sí participó en el ataque al consulado en Bengasi, pero que no fue responsable de la muerte del embajador Stevens y otros tres estadounidenses.


Un jurado de una corte federal de Washington DC encontró culpable a Ahmed Abu Khataka de apoyo al terrorismo, destrucción maliciosa de propiedad pública y porte de armas semiautomáticas en el curso de un crimen violento.
Sin embargo, el jurado lo encontró inocente en el cargo de asesinato contra el embajador estadounidense Chris Stevens y cuatro estadounidenses del personal de seguridad de la delegación diplomática que murieron en el ataque el 11 de septiembre de 2011.
El jurado tomó cinco días para llegar a su decisión, al cabo de un juicio que duró siete semanas. Ahora Khatala, quien fue capturado en 2014 por fuerzas especiales de EEUU en Libia, enfrenta la posibilidad de ser sentenciado hasta a 60 años en prisión.
Aunque los abogados de Khatala aseguraron que su cliente era un trabajador de la construcción que estaba siendo injustamente acusado, era conocido en la región por haber formado una pequeña milicia para enfrentar a las fuerzas del entonces líder libio Muamar Gadafi.
Khatala negó tener vínculos con Al Qaeda y con el ataque al consulado, aunque testigos presentados en el juicio aseguraron que él estuvo allí armado con fusiles AK 47, lanzadores de granadas y otras armas portátiles.
Un caso politizado
El ataque contra el consulado fue usado por los republicanos para cuestionar la actuación de la entonces secretaria de Estado Hillary Clinton, a quien acusaban de haber actuado negligentemente al no garantizar la protección de los estadounidenses y no desplegar una fuerza para rescatarlos.
El caso fue objeto de una larga investigación por parte de varios comités del Congreso y finalmente en 2014 quedó en manos de un comité especial de la Cámara de Representantes promovido por los republicanos.
En octubre de 2015, Clinton compareció por unas doce horas ante los representantes quienes al final del careo reconocieron no haber obtenido informacion nueva sobre la tragedia,
En junio de 2016, en medio de la campaña presidencial, el comité presento sus conclusiones en las que criticó las fallas de inteligencia por parte de la CIA y la falta de preparación de seguridad en el Departamento de Estado, así como la tardanza en enviar ayuda a los diplomáticos.
Los demócratas publicaron otro informe en el que concluyeron que Clinton no pudo haber hecho nada para prevenir lo ocurrido en Bengasi y acusaron a la mayoría republicana de haber utilizado la investigación como una oportunidad para incriminar a la entonces virtual nominada presidencial.





