Producir droga cerca de la frontera con EEUU: la nueva estrategia del Cartel de Sinaloa

En un paraje solitario del Valle de Mexicali, a seis millas de la barrera metálica que divide a México y California, un par de tablas sostenidas por cinco palos ocultaban el narcolaboratorio más grande que se haya descubierto en Baja California en años recientes. Varios tambos guardaban ocho toneladas de precursores químicos, con los cuales trataban de elaborar millones de dosis de drogas sintéticas.

Por el tamaño del lugar, la investigación apuntó hacia el cartel más fuerte en esa región, el de Sinaloa.

Las autoridades también sospechan que esa organización criminal liderada por el capo Ismael ‘El Mayo’ Zambada y los hijos de su compadre Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán, está detrás de la gran mayoría de los sembradíos de marihuana y amapola que han destruido en Ensenada, Mexicali, Tecate y Tijuana.

Es una nueva estrategia del cartel para reducir los costos de operación y los riesgos por decomisos. Desde ese laboratorio en Mexicali, que desmantelaron el 5 de septiembre, solo había que manejar unos minutos para llevar los cargamentos a una bodega o cruzarlos directamente a través de una garita.

En cambio, el Triángulo Dorado, la región serrada donde concluyen los estados de Sinaloa, Chihuahua y Durando, donde el cartel produce la mayoría de sus narcóticos, está a una distancia de 1,000 millas o 19 horas de manejo de la ciudad fronteriza de Tijuana.

La Fiscalía de Baja California ha detectado desde finales de agosto tres laboratorios clandestinos y cuatro plantíos de marihuana, que sus agentes encontraron en un periodo de solo 48 horas.

Otro narcolaboratorio fue encontrado en Ensenada la mañana del 18 de septiembre. Estaba sobre la carretera que lleva a la turística Ruta del Vino, cerca del poblado Ignacio Zaragoza. Allí confiscaron varios tambos con precursores químicos y múltiples tinas con metanfetamina en proceso de fabricación.

La Fiscalía lo catalogó como “otro golpe contundente al narcotráfico”, afirmando que ese decomiso “evita la producción y distribución de una considerable cantidad de drogas en la entidad”.

Tres semanas antes, el 28 de agosto, la agencia destruyó otro laboratorio en la avenida General Lucio Blanco de la colonia Benito Juárez, en Mexicali.

96 plantíos de marihuana este año

Las autoridades temen que operadores del Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG), otros que trabajan para los restos del Cartel de los hermanos Arellano Félix, así como traficantes independientes que pagan ‘derecho de piso’, también están produciendo droga en varios lugares de Baja California, aprovechando que las acciones del Ejército mexicano para erradicar plantíos y laboratorios se enfocan en otros estados.

A pesar de ello, la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) informó que del 1 de enero al 8 de septiembre destruyó 96 plantíos que estaban en un territorio de 206,00 metros cuadrados (675,000 pies cuadrados) en ese estado. La mayoría fueron sembrados en Ensenada (45) y Mexicali (34).

Solo esta semana, dos operativos arrancaron más de 40,000 plantas de cannabis en cuatro lugares en Tecate, una zona parcialmente controlada por el Cartel de Jalisco. Tres sembradíos estaban en la Ruta del Vino, en una superficie de unos 2,500 metros cuadrados (27,000 pies cuadrados), y los encontraron el martes. Dos días después hallaron otro en el rancho El Álamo, en el mismo municipio.

Hace cinco años, Baja California no figuraba como uno de los mayores productores de marihuana, ni de amapola de México. Solo en el Triángulo Dorado crecieron tanto como el 71% de todas las plantas de cannabis destruidas entre 2007 y 2015, según el reporte ‘El mapa del cultivo de drogas en México’. En ese período, en Baja California había 510 hectáreas de la hierba o el 0.4% del total.

El mismo análisis indica que en Guerrero, Sinaloa, Durango y Chihuahua se procesó en esos años 93.3% de la goma de opio confiscada en México. Entonces, los militares cortaron más de 137,000 hectáreas de amapola. En Baja California solo había 4 hectáreas o el 0.003%, comparado con el resto del país.

Pero en años recientes más cultivos de adormidera han sido encontrados en ese estado fronterizo. El Ejército indicó que entre marzo y junio pasados destruyó al menos 19 plantíos de amapola, uno de los cuales tenía una extensión de alrededor de 60,000 metros cuadrados (645,000 pies cuadrados).

En mayo de 2019, la entonces Policía Federal mexicana quemó un sembradío de amapola que estaba muy cerca de la línea divisoria entre Sonora y Arizona. Lo descubrieron durante un operativo de cuatro días que esa agencia realizó con la Patrulla Fronteriza para desmantelar un campamento clandestino usado para espiar a los oficiales estadounidenses en el oeste de Nogales.

Un total de 19 personas, incluyendo seis hondureños “ligados a organizaciones criminales” fueron arrestadas. Estaban en un sitio cubierto con cobijas atadas a unos árboles, en una montaña de Sonora. Al seguirles la pista con aeronaves y equipo de vigilancia dieron con varias plantas de amapola.

Actualmente, el Cartel de Jalisco le disputa al Cartel de Sinaloa las ciudades fronterizas de Nogales, Tijuana, Mexicali y Tecate. Esa batalla ha dejado miles de muertos, sobre todo en Baja California. Ambos son los principales distribuidores de narcóticos en EEUU.