La gentrificación (o aburguesamiento como también le llaman algunos expertos) de Nueva York ha aumentado durante las últimas dos décadas a medida que residentes pudientes, gente joven con hijos mayores que ya se fueron de la casa y los superricos han acudido a la ciudad en masa. Un reporte publicado recientemente por mis colegas en el Centro Furman para Bienes Raíces y Política Urbana rastrea el patrón del aburguesamiento a lo largo de 55 vecindarios en Nueva York. Este siguió los cambios en edad, ingreso y preparación académica de residentes que se han mudado a (y fuera de) estos vecindarios, así como los cambios en precios de viviendas y alquileres.
Estos son los vecindarios donde Nueva York se está gentrificando
Un nuevo reporte del Centro Furman de la Universidad de Nueva York traza los cambios en vecindarios a lo largo de décadas.


El reporte divide los vecindarios de la ciudad en tres categorías: los que se están gentrificando (los cuales consistían de residentes de bajos ingresos en 1990 y que experimentaron un aumento de alquiler sobre el medio entre 1990 y 2010 a 2014); los no que no se están gentrificando (vecindarios con residentes de bajos ingresos en 1990 pero que experimentaron un crecimiento en alquileres más modestos que las áreas que están aburguesando); y los de altos ingresos (los que tenían residentes de altos ingresos en 1990 y que ya habían sido gentrificados).
El mapa abajo demuestra las localizaciones de los tres tipos de vecindarios en toda la ciudad. Los vecindarios que se están gentrificando (mostrados en azul oscuro) mayormente están ubicado en el alto Manhattan cerca de Harlem y en partes de Brooklyn, particularmente en áreas que son adyacentes a Bajo Manhattan. Se puede observar los vecindarios que no se están gentrificando (mostrados en azul claro) al lado de muchos de los vecindarios que sí están pasando por este proceso, lo cual refleja la yuxtaposición de ventaja concentrada y desventaja en la ciudad de Nueva York hoy en día.

Por lo general los autores clasifican a unos 15 vecindarios (un 27% del total) como en proceso de gentrificación y a 7 más como no gentrificándose (un 13% del total). Pero el porcentaje más grande de vecindarios (un 60% o unos 33 barrios) consiste en distritos de personas de altos ingresos que aburguesaron hace mucho tiempo, lo cual sugiere que la gentrificación reciente está aún más concentrado en unos pocos vecindarios selectos.
La tabla que se muestra abajo lista los 15 vecindarios —más del 25% del total de los 55 analizados— que se consideran como vecindarios aburguesadores. Esto incluye siete en Brooklyn y seis en Manhattan. Entre los barrios gentrificados, Williamsburg/Greenpoint en Brooklyn vio el aumento mayor en alquiler promedio entre 1990 y 2010-2014: un 78%. Los alquileres aumentaron en más de 50% en Harlem central y en el Lower East Side/Barrio Chino, en más de un 40% en East Harlem y Bushwick y en más de un 30% en Bedford Stuyvesant y Morningside Heights/Hamilton Heights. En cambio, en otro barrio que se está aburguesando —South Crown Heights— los alquileres incrementaron en sólo un 18%.
| Vecindario | Aumento de renta |
|---|---|
| Williamsburg/Greenpoint | 78.70% |
| Central Harlem | 53.20% |
| Lower East Side/Chinatown | 50.30% |
| Bushwick | 44.00% |
| East Harlem | 40.30% |
| Morningside Heights/Hamilton Heights | 36.70% |
| Bedford Stuyvesant | 36.10% |
| North Crown Heights/Prospect Heights | 29.90% |
| Washington Heights/Inwood | 29.30% |
| Mott Haven/Hunts Point | 28.00% |
| Astoria | 27.60% |
| Sunset Park | 23.90% |
| Morrisania/Belmont | 23.50% |
| Brownsville/Ocean Hill | 20.50% |
| South Crown Heights | 18.10% |
Los alquileres también se dispararon en varios vecindarios a lo largo de la ciudad donde ya vivía la gente de altos ingresos, entre ellos Greenwich Village/Financial District, el cual vio el mayor incremento (61.2%), seguido por Brooklyn Heights/Fort Greene (53.2 %), Chelsea/Clinton/Midtown (51.8%), Park Slope/Carroll Gardens (47.3%), y Stuyvesant Town/Turtle Bay (38.3%).
La gentrificación en la ciudad de Nueva York es el resultado de una serie de tendencias económicas y demográficas que han transformado a la ciudad más ampliamente: notablemente hay que considerar el aumento en personas solteras que regresaron a la ciudad que no eran sólo más pudientes, sino también más jóvenes y con un mayor nivel educativo. En años recientes los vecindarios gentrificados han experimentado aumentos sustanciales en ingresos. Los ingresos familiares promedios incrementaron en un 7.3% en los años 90 y en un 6.1% entre 2000 y 2010-2014 en esos vecindarios. A lo largo de la ciudad los ingresos familiares promedios crecieron un poco en los 90 pero descendieron después del año 2000.
Los vecindarios que se están gentrificando también han tenido un aumento pronunciado en hogares con personas que estudiaron en universidades. Entre 1990 y 2010-2014, el porcentaje de neoyorquinos con licenciaturas creció en toda la ciudad. Sin embargo, de nuevo este cambio fue más pronunciado en los vecindarios que se estaban aburguesando: aumentó en un 15.6%. De hecho, entre 2010 y 2014 un 42% de las personas mayores de 25 años que recientemente se había mudado a estos vecindarios aburguesadores ya tenían una licenciatura universitaria. Por contraste, en los vecindarios no aburguesadores, sólo un 19% de las personas que recientemente se habían mudado a estos barrios tenían una licenciatura.
Los vecindarios gentrificados también han atraído a varios residentes jóvenes. En 1990 y 2000 los residentes entre 20 y 34 años de edad representaban un cuarto de la población neoyorquina y estos se mantuvieron distribuidos de manera bastante pareja por los vecindarios. Pero entre 2000 y 2010-2014, los vecindarios de altos ingresos empezaron a perder sus cuotas de adultos y los barrios no gentrificados en realidad vieron que su cuota de adultos subió un poco. En los barrios gentrificados, la cuota de adultos aumentó más que en cualquier otro vecindario (de 25% en 2000 a 28.8% en 2010-2014). De manera parecida, desde 1990 la cuota de casas de una sola persona ha incrementado a una tasa más rápida en los barrios gentrificados que en el resto de la ciudad.
No sorprende que los vecindarios gentrificados hayan experimentado una transformación racial significativa: perdieron grandes cantidades de residentes negros mientras que ganaron una población sustancial de blancos. En Nueva York el porcentaje de residentes blancos en los barrios gentrificados aumentó de un 18.8% en 1990 a uno 30.9% en 2010. Mientras tanto, el porcentaje de residentes asiáticos e hispanos en los barrios gentrificados se incrementó un poco, comparado con un crecimiento mucho más rápido en toda la ciudad. Al igual que ha sucedido en muchas ciudades, los porcentajes generales de residentes negros y blancos han descendido desde 1990 mientras que el porcentaje de residentes asiáticos e hispanos ha aumentado.
Por supuesto, Nueva York es un caso de estudio en el movimiento de regreso a ciudades. Después de perder a más de 800,000 residentes entre 1970 y 1980 —una cantidad mayor de las poblaciones respectivas de Detroit, Seattle, Washington D.C. o Nashville— desde entonces la ciudad ha ganado residentes. Lo interesante de esto es que si es posible que este crecimiento en población haya impulsado la gentrificación, la población de vecindarios aburguesadores aún era un 15.8% menor en 2010 de lo que era en 1970, tal como muestra la tabla abajo. Un mayor crecimiento en la población se dio tanto en vecindarios de ingresos altos —los cuales aumentaron en un 13.6% desde 1970— y en los barrios no gentrificados, cuyas poblaciones incrementaron en un 8%.

Los barrios gentrificados agregaron unidades de viviendas a lo largo de este período, lo cual señaló el influjo de casas más pequeñas pero más pudientes que iban a consumir unidades más nuevas y más grandes. Si bien los barrios gentrificados perdieron más de 128,000 unidades de vivienda en los años 70 y 80, en los 90 la vivienda creció en un 7.5%. Y entre 2000 y 2010, la vivienda en barrios gentrificados se incrementó en otro 7.2%, comparado con un aumento de 4.5% en barrios de altos ingresos y un incremento de 5.5% en barrios no aburguesadores. Durante este tiempo los barrios aburguesadores en Nueva York ganaron unas 57,550 unidades adicionales de vivienda.
Junto con el aburguesamiento, la ciudad también ha experimentado un disparo en los alquileres y en las cargas de alquiler que han ido escalando, las cuales han afectado más a los pobres y a los desfavorecidos. La carga general de alquiler en Nueva York (lo cual es medido en el reporte como el porcentaje de casas que se gastan un 30% o más de sus ingresos brutos en alquiler) aumentó de un 40.7% en 2000 a un 51.7% en 2010-2014. Aunque todos los vecindarios experimentaron un incremento en seis cargas de alquiler, de nuevo los vecindarios gentrificados experimentaron el aumento más significativo (de 42.3% en 2000 a 52.9% en 2010-2014). Y sin embargo, ya para 2010-2014 había un porcentaje mayor de casas con cargas de alquiler en los vecindarios no aburguesadores (58.5%), mientras que los vecindarios de gente con altos ingresos tuvieron un porcentaje un poco más pequeño que los demás (49.3%). Naturalmente, los vecindarios neoyorquinos de bajos ingresos en vecindarios gentrificadores eran los que más sufrieron de una carga de alquiler, ya que experimentaron un incremento de 21 puntos porcentuales entre 2000 a 2010-2014. Lo que sí sorprendió fue que las casas con ingresos moderados en estos vecindarios experimentaron un incremento comparable de 18 puntos porcentuales durante este mismo período.
Por lo general esto sugiere que el impacto de la gentrificación ocurre más a través de cargas de alquiler incrementadas que mediante el desplazamiento directo (lo cual ha sido argumentado en investigaciones anteriores). A medida que Nueva York se ha ido gentrificando, las cargas de alquileres han incrementado para muchos residentes. A fin de cuentas, Nueva York sigue siendo dividido en clases (rica y pobre) a medida que sus vecindarios viejos de clase media ceden ante la gentrificación.
Este artículo fue publicado originalmente en CityLab.com.









