La popularidad de Meghan Markle y el príncipe Harry en Gran Bretaña cayó a su punto más bajo tras las revelaciones explosivas que hicieron en contra de la familia real durante una entrevista con Oprah Winfrey.
Cae la popularidad de Meghan Markle y el príncipe Harry en Gran Bretaña, pero en EEUU es otra la historia
Tras su entrevista con Oprah Winfrey, un sondeo reflejó que los temas que más ha repercutido entre los británicos han sido el estatus de la monarquía y los argumentos en contra de la familia real y los tabloides, mientras que los estadounidenses parecen más preocupados por las revelaciones de racismo.

El declive de la popularidad de los duques de Sussex ocurre luego que Meghan dijo el 7 de marzo, en la entrevista, que el palacio de Buckingham la ignoró cuando pidió ayuda porque tenía pensamientos suicidas y de que ambos dijeron que alguien de la familia real preguntó de qué color sería la piel de su hijo Archie cuando naciera.
Tras la entrevista, muchos británicos que apoyan la monarquía han criticado a la pareja por dañar la imagen e integridad de la familia real, una institución de 1,000 años que muchos exaltaron por sus esfuerzos de integración y modernización en 2018, cuando Harry desposó a una actriz estadounidense divorciada y biracial que le lleva tres años.
Ahora hay más británicos con una percepción negativa (48 por ciento) que positiva (45 por ciento) hacia Harry, mientras que la mayoría de encuestados (58 por ciento) tuvo una opinión negativa de Meghan. Solo uno de cada 10 participantes dijo tener a bien a la duquesa, según el sondeo realizado por YouGov divulgado el 12 de marzo. Estas opiniones representan un declive de 15 puntos para Harry y 13 puntos para Meghan en comparación a un sondeo realizado cinco días antes de la entrevista.
En Estados Unidos, entre tanto, el matrimonio que vive en Montecito, California, goza de una mejor percepción. El 47 por ciento dijo ser más propenso a empatizar con Meghan y Harry, mientras que solo el 23 por ciento dijo inclinarse por la familia real, según otro sondeo de YouGov divulgado esta semana.
Pese a que las revelaciones del matrimonio han desatado una crisis de relaciones públicas en el palacio de Buckingham y muchos británicos han dicho estar preocupados por los posibles efectos que este escándalo podría tener, el sondeo indica que la percepción pública en favor de la monarquía no ha variado considerablemente.
El 63 por ciento de los encuestados dice que la monarquía debe de seguir tal cual, en comparación al 67 por ciento que dijo lo mismo en octubre. El apoyo a la idea de elegir a un jefe de estado en vez de tener una monarquía solo subió de 21 por ciento a 25 por ciento. Esta opinión está alineada con la de algunos expertos que dicen que las revelaciones del matrimonio probablemente no van a causar cambios trascendentales porque la monarquía está basada en un siglo de privilegio y supremacía blanca.
Las revelaciones sobre racismo, que hicieron que el príncipe William respondiera diciendo que la familia real no es racista, también repercutieron en ambos lados del Atlántico.
En Gran Bretaña, el 66 por ciento de los encuestados dice que debe de haber una investigación sobre las revelaciones de racismo, mientras que solo el 19 por ciento se muestra en contra, de acuerdo con un sondeo de Newsweek divulgado esta semana.
En Estados Unidos, entre tanto, la mayoría de los encuestados (58 por ciento) cree que la raza de Meghan, de padre blanco y madre negra, tuvo algo que ver con la manera como fue tratada por la familia real. Esta percepción resalta cuando se toma en cuenta que el 42 por ciento de los participantes, así como el 72 por ciento de los encuestados afroestadounidenses, cree que la raza de la duquesa tuvo mucho que ver con el tratamiento que recibió.
La percepción de una figura pública depende mucho de la prensa y el caso de Meghan y Harry no son la excepción. La pareja se quejó también de las historias publicadas por tabloides británicos, diciendo que han alentado el racismo en contra de la duquesa al punto de que han llegado a recibir amenazas de muerte.
Las revelaciones de la pareja han puesto en jaque a los tabloides.
The Washington Post reportó esta semana que algunos reporteros británicos han desestimado las acusaciones de intolerancia, diciendo que la cobertura de la realeza puede ser mordaz, pero es el tratamiento normal que los tabloides dan a todas las celebridades
Sin embargo, otros periodistas, especialmente de minorías étnicas, dijeron que la prensa británica es “profundamente racista” contra los musulmanes, inmigrantes, negros y gente del sur de Asia, agregó el Post.


























