Este lunes han salido a relucir fotos que le tomaron a la duquesa de Sussex la semana pasada, en el aeropuerto de Victoria. Mientras su esposo, el príncipe Harry, aún negociaba con la reina Isabel II su retiro como miembros de primer orden de la monarquía británica, la actriz estadounidense de 38 años saboreaba los frutos de esa libertad por la que tanto lucharon.