En la historia de la ciencia, muchos personajes han dejado su impronta para la posteridad con sus hallazgos y sus ideas. Desde los antiguos filósofos presocráticos, observadores acuciosos como Empédocles de Agrigento y Demócrito, sacaron conclusiones que después de dos milenios nos asombran por su precisión y elegancia. Hoy los invito a conocer a uno de ellos: Giordano Bruno y sus aportes al pensamiento científico moderno.
Antecedentes históricos

Desde que el filósofo Aristóteles al igual que Platón, promulgaran su teoría geocéntrica, es decir que es la estrella la que se mueve alrededor de la Tierra y no al contrario, como sucede realmente, la ciencia asumió como un dogma esta idea, sin que pudiera ser refutada por ningún pensador hasta los albores de la edad moderna, excepto por Aristarco de Samos.
El tiempo de Giordano Bruno

Durante la Edad Media, con el ascenso del cristianismo al poder del Imperio Romano, las teorías escolásticas que apoyaban el geocentrismo, condenaban a todo aquel que pensara de manera diferente y se atreviera a divulgarlo. En el siglo XVI, Nicolás Copernico fue el primer científico en proponer después de Aristarco, que era el Sol el centro de un sistema planetario del que la Tierra formaba parte.
Sin embargo, Copernico jamás llegó a ver el fruto de sus investigaciones en una publicación, pues murió justamente el día en que salía impresa su obra. Giordano Bruno, un monje astrónomo y poeta italiano, nacido en cercanías de Nápoles, daría un vuelco a la concepción geocéntrica y a la astronomía anquilosadas en las tinieblas dogmaticas del Medioevo.
El pensamiento de Giordano Bruno
Al contrario de los demás miembros de su comunidad religiosa, Bruno era iconoclasta, rechazaba la adoración de santos de escayola y negaba la existencia de un dios creador del universo, lo que hizo que fuera tildado con escándalo como blasfemo y hereje. Paralelamente, Giordano Bruno trabajaba en las teorías copernicanas, sustentando que la Tierra se movía alrededor de una estrella que era parte de un todo infinito y habitado por criaturas con inteligencia, como la Tierra.
El interés principal de Bruno era sacar de la ignorancia dogmática a la Europa que aún no conocía el Renacimiento, por medio de tesis adelantadas para la época en libros como El Infinito Universo y sus mundos, La cena de las Cenizas y De la Causa y los principios del Uno, principalmente.
Juicio y muerte
Luego de viajar por varios países protestantes de Europa, Giordano Bruno retornó a Italia a instancias de un noble llamado Mocenigo que le contrató. Sin embargo, fue éste quien lo entregó a la Inquisición en cabeza de Roberto Belarmino –quien juzgó a Galileo−, quien hizo dictar sentencia papal para ser condenado a la hoguera en el año 1600. En un fragmento de un poema escrito a sus verdugos dice:
"Porque las luces busqué de la verdad,
No en vuestra falsa ciencia que el pensamiento abruma
Con dogmas y con mitos robados a otra edad,
Sino en el libro eterno del Universo mundo".
El aporte de Giordano Bruno al pensamiento científico moderno, estriba en sus concepciones adelantadas a las ideas derivadas de los dogmas de la Edad Media y el oscurantismo en que la Inquisición sumía al pensamiento filosófico y científico. Bruno es tenido, como muchos otros pensadores, como un mártir defensor de las ideas científicas ante la cerrazón del dogma.
¿A qué otro científico, astrónomo, matemático conoces por sus aportes a las ciencias?