María y Felipe Tapia sobrevivieron de milagro a la inundación que destruyó su casa en Hunt, Texas. El agua arrastró su camioneta y los dejó atrapados, pero lograron salir con vida. La familia, que lleva 24 años viviendo allí, asegura que nunca recibieron una alerta para evacuar. Hoy piden ayuda a la comunidad tras perderlo todo. Te puede interesar: Imágenes aéreas de la tragedia en Texas: así se ve la zona devastada por las inundaciones.

La solidaridad de la comunidad hispana no se hizo esperar tras la tragedia provocada por la crecida del río Guadalupe, en el centro de Texas. Moisés Mendoza, un mexicano que vive desde los 13 años en las zonas de Hunt y Kerrville —las más afectadas por la emergencia—, decidió ayudar limpiando casas y brindando apoyo a los damnificados. “Quedé aterrado por todo lo que pasó”, contó.

Felipe y María Tapia llevan viviendo 24 años en Hunt, Texas; sin embargo, la madrugada del 4 de julio lo perdieron todo por la devastadora inundación. Felipe cuenta que tras el desbordamiento del río Guadalupe quedaron atrapados en su casa debido a que el agua trabó su puerta, pero como pudo "agarré a mi esposa y salimos". Asegura que nunca les avisaron de evacuar, “ahí falló el gobierno”.

Lorena Guillén es dueña de un parque de vehículos recreativos que fue devastado tras la crecida del río Guadalupe, en el condado Kerr. La mujer cuenta que sobre la 1:00 am empezó a llover muy fuerte, pero fue hasta después de las 3:30 am que aparecieron las luces de los equipos de rescate. Guillén asegura que en medio de las inundaciones escuchaba los gritos de la gente y veía autos flotando con personas adentro. No dejes de ver: Muere el director del campamento Mystic: intentaba rescatar a varias menores.

Tras las inundaciones repentinas provocadas por la crecida del río Guadalupe, crecen las preguntas sobre si la tragedia pudo haberse evitado, o al menos reducido, con alertas tempranas. Según las autoridades, la cifra preliminar de fallecidos en el condado de Kerr asciende a 68 personas: 40 adultos y 28 niños. No se descarta que el número aumente, ya que al menos 10 menores de Camp Mystic continúan desaparecidos.

Desde el aire, se aprecia la magnitud de la tragedia en Texas. Árboles caídos, escombros, puentes destruidos y labores de búsqueda marcan el paisaje tras el desbordamiento del río Guadalupe, que arrasó con decenas de personas. Las imágenes aéreas muestran la devastación que dejaron las históricas inundaciones. Te puede interesar: ¿Fallaron las alertas? Tragedia en Texas tomó por sorpresa a cientos de familias mientras dormían.