Como madre siempre querrás que los amigos de tu hijo sean buenas personas, amigables, honestos, simpáticos y que tengan buenos valores para que no afecten negativamente a tu hijo, ¿verdad? No siempre se pueden controlar las amistades que tienen los hijos porque se pueden formar en la escuela, en actividades extraescolares o en otros lugares a donde no tienes acceso, pero igualmente debes saber que no tienes por qué tener a tu hijo siempre bajo control ¡eso es inadmisible!

A lo largo de la hermosa y gratificante experiencia de ser madres, hay situaciones en las que parece que las cosas se complican o nos preguntamos cómo podríamos abordar ciertos temas como el sexo, sobre todo si tu hijo en niño. Continua leyendo, te ofrezco algunas ideas de mi experiencia personal como mamá.

Todos los padres nos emocionamos ante el primer amor de nuestro adolescente, pero también debemos admitirlo: tenemos cierto temor pues sabemos que en la adolescencia el amor llega y se puede ir así de rápido como llegó. Si tienes un adolescente en casa con el corazón roto, seguramente te interesarán estos prácticos remedios caseros que todo padre debería de practicar para ayudar a su hijo.

La vida escolar es para la mayoría de nosotros una época llena de buenos recuerdos y enseñanzas, no solo en el campo académico, sino también para la vida en general, pues tanto en el aula como fuera de ella siempre hay aprendizajes que quedan.

Los adolescentes están en pleno proceso de cambio, deben crear una identidad propia y por este motivo la libre expresión resulta fundamental para que construyan su personalidad y puedan tener como suyos unos valores y unas creencias que le harán crecer.

La relación entre padres y adolescentes siempre resulta un desafío porque ellos están cambiando su forma de pensar y están comenzando a conocer el mundo desde otra perspectiva. Sin embargo, no hay nada que complique más una buena relación con tu hijo adolescente que la generalización, los estereotipos y los mitos sobre cómo debe comportarse un padre de un hijo adolescente. No perdamos más tiempo y vamos a conocer cuáles son estos mitos.