Diversos síntomas que pueden presentarse en la niñez y la adolescencia pueden alertarnos sobre un posible trastorno bipolar. Es importante estar atento para detectarlo ya que como sabemos los niños atraviesan diferentes etapas en el desarrollo, en las que los cambios de humor y carácter son normales, algo que puede dificultar el hecho de que percibamos con claridad la problemática.
Señales de trastorno bipolar en niños y adolescentes

¿Qué es el trastorno bipolar?
El trastorno bipolar es una afección mental que reviste importancia, en la que se combina estados depresivos con cambios de humor, manía y alteraciones en el rendimiento de la persona como por ejemplo falta de energía, lo que hace que ésta no pueda desarrollar su vida con total normalidad.
El factor hereditario juega un papel importante en la persona afectada, es necesario que se considere la existencia de familiares que padezcan el problema.
Señales de trastorno bipolar en niños y adolescentes
Hay señales que son claros indicios de que un niño o adolescente padece trastorno bipolar, tales como el tener problemas en el colegio, con la familia y con los amigos. Pero hay más:
- Pasa de estar muy excitado o contento a estar irritable.
- Posee una autoestima excesiva.
- Tiene gran cantidad de energía, tanto así que puede pasar días activo sin dormir y sin sentirse cansado.
- Habla a un ritmo acelerado, no le agrada que le interrumpan y cambia rápidamente de tema.
- Hace muchas cosas diferentes, pasa de una a otra sin dificultad.
- Su sexualidad se ve incrementada, también los pensamientos relacionados con el sexo.
- Realiza mucha actividad física.

En contra partida, cuando las personas bipolares atraviesan periodos de depresión, las señales son:
- Tristeza
- Alteraciones en el apetito.
- Sensación de incapacidad o culpa.
- Dificultad para concentrarse.
- Pensamientos frecuentes de suicidio.
- Falta de energía.
- No desea realizar actividades que antes le gustaban.
- Problema para conciliar el sueño o duerme demasiado.
- Dolores físicos, musculares, de estómago y de cabeza frecuentes.
- Reiteradas ausencias al colegio o al trabajo.
- Volverse antisocial y aislarse.
El diagnóstico del trastorno bipolar no es tan simple de realizar y es por ello que institutos como el Nacional de Salud Mental (NIMH), se encuentran haciendo investigaciones al respecto. Es de suma importancia que la persona afectada reciba un tratamiento adecuado; muchas veces se confunde a las personas con trastorno bipolar como si tuvieran déficit de atención con hiperactividad (TDAH), y erróneamente le se suministran antidepresivos, lo cual puede resultar muy perjudicial para quienes sufren de trastorno bipolar.
Es fácil que el TDAH se confunda con el trastorno bipolar en niños, por lo que debe ser muy bien evaluado por un psiquiatra o psicólogo para ser diagnosticado correctamente. En los niños la aparición del problema es de forma gradual, en cambio en los adolescentes y adultos por lo general aparece de forma repentina.
Aunque se sigue investigando al respecto, en la actualidad se utilizan medicamentos que cumplen la función de estabilizar el estado de ánimo de la persona afectada para evitar cambios repentinos en su conducta. En muchos casos se combina el tratamiento con psicoterapia y terapia cognitivo-conductual.
¿Has pasado por ésta experiencia? ¿Qué podrías aportar en relación al trastorno bipolar en niños y adolescentes? Tu comentario podría ser muy útil para otros padres.








