El efecto Mozart es el término que se utiliza para nombrar la influencia que ejerce la música clásica que compuso W. Amadeus Mozart en el comportamiento de los bebés. Esta música tiene efectos muy positivos en el desarrollo de la creación e intelectualismo de los más pequeños de la casa.

Es conocido que el bebé desde su gestación reconoce las voces de sus padres, allegados y también de los sonidos y música que rodean a la madre. Escuchar la misma música durante los meses de gestación causa una familiarización del bebé con el sonido. Luego de nacido, puede utilizarse para sus horas de sueño para inducirlo a dormir, o incluso en momentos de crisis lo ayudará a tranquilizarse.

Escuchar música para bebés es muy beneficioso desde el embarazo, esto está comprobado. Desde la década de los noventa se considera que la música es un estímulo importante en el desarrollo del bebé.

Los llantos desconsolados son normales y comunes en todo bebé, tanto como también lo son los desórdenes a la hora del sueño: o duermen muchísimo o les cuesta conciliar el sueño. Por ello, es necesario que los padres estimulen la relajación y la calma del bebé para que el pequeño no se estrese.

¿Buscabas alguna melodía para hacer dormir a tu niño? Además de contar ovejitas, sabes que otro de los trucos infalibles a la hora de conciliar el sueño de los peques es poner play a una linda melodía que haga cerrar sus ojitos y empezar a soñar.

Hacer que los más pequeños vayan a dormir puede ser una ardua tarea para los padres. Cuanto más intentan que los niños guarden sus juguetes de una vez por todas para ir a la cama, menos caso les hacen. Es como si los chicos nunca tuvieran sueño.