El Gobierno de Puerto Rico ya ha incurrido en tres impagos en el último año, pero el más cuantioso se produciría este viernes, 1 de julio, cuando vencerán bonos por valor de cerca de 2 mil millones de dólares, de los que unos 700 son obligaciones generales.

"Aunque no sabemos cuáles serán todas las ramificaciones si el Congreso no actúa antes de fin de mes, lo que tenemos claro es que son los 3,5 millones de ciudadanos estadounidenses que viven en Puerto Rico quienes sufrirán todavía más", afirmó Lew.

Organizadores lamentan además el consistente desinterés en el evento por parte de la alcaldesa de la Capital, Carmen "Yulín" Cruz.

"Como ya he subrayado en repetidas ocasiones a los acreedores, funcionarios federales y al pueblo puertorriqueño, no tenemos el dinero para pagar. Nuestra caja de herramientas está vacía."

Alejandro García Padilla permanece en Washington para cabildear por la aprobación del proyecto antes del 1 de julio cuando vence el próximo pago de las obligaciones generales.

El sindicato de maestros Educamos acusa al Gobierno de agravar la situación al recortar los recursos que se destinan al sistema de educación pública, donde se estima que el 90% de sus alumnos vive en condiciones de pobreza.