El ex subdirector de la campaña presidencial de Donald Trump en 2016, Rick Gates, fue condenado este martes a 45 días de cárcel y tres años de libertad condicional por conspiración y mentir al Buró Federal de Investigaciones (FBI) durante las investigaciones del 'Rusiagate'.
Sentencian a 45 días de cárcel a exasesor de Trump por conspiración y mentir al FBI en la investigación del 'Rusiagate'
Rick Gates fue subdirector de campaña del presidente en 2016. Se declaró culpable en febrero de 2018 por haber cometido fraude para ocultar dinero obtenido de cabildeo para Ucrania junto a quien era su jefe, Paul Manafort.

La condena se redujo considerablemente: podía haber sido de hasta cinco o seis años. Pero los fiscales tuvieron en cuenta su colaboración con el fiscal especial del caso, Robert Mueller, para la disminución de sus años en prisión. A eso se suma que deberá pagar una multa de 20,000 dólares y hacer 300 horas de trabajo comunitario.
La jueza de distrito a cargo del caso, Amy Berman Jackson, explicó al leer la sentencia que debió hacer un balance entre los crímenes cometidos por Gates y la evidencia que había aportado a los fiscales. "La información que dio Gates por sí sola justificaba e incluso exigía una investigación desde el punto de vista de seguridad nacional, de la integridad de nuestras elecciones y la aplicación de las leyes", señaló Jackson.
"No todos los testigos con información cooperan y no todos los que cooperan dicen la verdad", justificó la jueza. "El señor Gates destacó como alguien que, a pesar de las circunstancias, hizo lo correcto", agregó al explicar que el ex subdirector de campaña de Trump continuará cooperando en las indagaciones.
Gates fue considerado como el testigo más importante en un juicio en Virginia, uno de los dos llevados a cabo contra Paul Manafort, exjefe de la campaña de Trump, quien fuera su mentor y fuera hallado culpable de ocho de 18 cargos de los que se le acusaba. En sus declaraciones explicó que él y su jefe asesoraron a gobiernos extranjeros entre 2006 y 2017, incluido el del expresidente prorruso de Ucrania, Víktor Yanukóvich. También trabajaron para oligarcas rusos, a quienes ayudaron a mejorar su imagen. Hicieron todo sin comunicárselo a las autoridades de Estados Unidos, lo que constituye un delito.
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Por esas actividades, Manafort recibió, solo en Ucrania, hasta 60 millones de dólares que supuestamente ocultó en empresas fantasmas y en cuentas bancarias en el extranjero, según la acusación.
Gates afirmó que él y Manafort tenían 15 cuentas bancarias en otros países y que no las declaró al fisco "siguiendo las direcciones de Manafort". También admitió una gran cantidad de crímenes, desde falsificar sus declaraciones de impuestos hasta el lavado de dinero.
Manafort y Gates se entregaron al FBI el 30 de octubre de 2017 y se declararon no culpables de los cargos que presentó en su contra el fiscal especial Robert Mueller, que investigaba los lazos entre Rusia y la campaña republicana y las posteriores obstrucciones a la justicia por parte de Trump.
Sin embargo, en febrero Gates se desligó de Manafort al firmar una declaración de culpabilidad y acceder a colaborar con Mueller. Preguntado por el equipo del fiscal especial sobre si participó en alguna actividad criminal con Manafort, Gates respondió en ese momento que sí.
Este martes, Gates leyó a la jueza algunas ideas. Le dijo que "lamentaba mucho sus errores" y que aceptaba haber tenido "completa responsabilidad" por sus acciones.
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