"No sabemos quién eres": el dilema migratorio de un hombre que creía ser estadounidense

MIAMI, Florida.- Durante más de 50 años, José 'Joe' Cervera pensó que era ciudadano estadounidense, nacido en Puerto Rico. Se unió al ejército durante la era de Vietnam y luego tuvo una larga carrera en la seguridad privada donde recibió cartas de agradecimiento del Servicio Secreto y la Casa Blanca.
Está casado con una estadounidense de Pensilvania y es padre de tres hijos nacidos en Estados Unidos.
Pero, después de la muerte de su madre en 2006, se enteró de un secreto impactante. Escondido entre los papeles de su madre, descubrió otro certificado de nacimiento y se enteró de que lo más probable es que fuera adoptado y que lo hayan traído a Estados Unidos con un nombre falso, cuando era un bebé.
En lugar de ser José Antonio Cervera, nacido en la Nochebuena de 1955 en San José, Puerto Rico, su verdadero nombre era José Evaristo Cervera, nacido en la misma fecha, pero en La Habana, Cuba, y un año después, en 1956.
"Me consideraba estadounidense"
Para corregir el error de su madre, en junio de 2010 solicitó la naturalización. Hizo su examen y aprobó una entrevista en septiembre, pero mientras su solicitud aún estaba en proceso, empeoró el error de su madre al votar en las elecciones de mitad de período en noviembre.
"Pido disculpas de corazón por votar. No estaba intentando tergiversar nada deliberadamente; fue una cuestión de costumbre. Me consideraba estadounidense y… votar era parte de eso", le dijo a Univision Noticias.
De hecho, Cervera fue durante muchos años un republicano registrado y había votado en numerosas elecciones.
Cervera dijo que explicó durante la entrevista con el servicio de inmigración que su madre - él la llama su "presunta madre" - le había mentido.
"Fui sincero y cooperativo en la mayor medida posible", dijo.
Les mostró a los funcionarios de inmigración sus documentos militares que muestran que se unió al Ejército de Estados Unidos en agosto de 1974 y fue dado de baja con honores en septiembre de 1977.
También tenía su certificado de matrimonio de 1975. Está casado y tiene tres hijos adultos con su esposa Bernadette, nacida en Estados Unidos, en Pensilvania, e hija de un verterano de la Segunda Guerra Mundial.
Cervera había trabajado como director de seguridad para el lujoso club isleño de Fisher Island, ubicado entre Miami y Miami Beach, un distrito que tiene uno de los ingresos per cápita más altos de todos los códigos postales de los Estados Unidos.
Había brindado servicios de seguridad a personas como el presidente Bill Clinton y el general Norman Schwarzkopf, el exjefe de las fuerzas estadounidenses en el Medio Oriente en la primera Guerra del Golfo.
También presentó certificados de reconocimiento del Servicio Secreto y la Casa Blanca por eventos en los que había estado involucrado.
Pero, al final de su entrevista de inmigración, Cervera cuenta que el supervisor le dijo: "No sabemos realmente quién eres".
Falta de "carácter moral"
Los funcionarios de inmigración decidieron en abril de 2011 que su voto en noviembre de 2010 lo inhabilitaba para la naturalización. " Ha cometido un acto ilícito que repercute negativamente en su carácter moral", afirmaba la carta de denegación.
"La decisión del INS (Servicio de Inmigración y Naturalización) fue devastadora para mí. Lloré. Mi esposa lloró", dijo.
"Los no ciudadanos como yo hemos servido en las fuerzas armadas durante tiempos de paz y guerra y muchos han dado su vida al servicio de este país desde su creación. Sorprendentemente hay muchos veteranos no ciudadanos en casos similares al mío que se creían ciudadanos y se les ha negado la ciudadanía, están atrapados en el limbo y en muchos casos han sido deportados a sus países de origen", añadió.
Su esposa, Bernadette, se mantiene firme a su lado. "Hemos estado juntos durante 45 años. Es patriota en cada fibra de su cuerpo", le dijo a Univision Noticias.
Buscando la verdad: 3 certificados de nacimiento
A lo largo de los años, Cervera ha intentado averiguar quién es realmente. Tiene tres certificados de nacimiento, uno de Cuba, otro de Puerto Rico y un tercero que le envió el estado de Nueva York después de enterarse de que podría haber sido adoptado allí antes de ser llevado a Cuba.
"Somos quienes nos dicen que somos"
Él no sabe cuál de ellos es el verdadero, si es que alguno lo es. Tampoco sabe cuántos años tiene ni cuándo es realmente su cumpleaños. Ahora, con alrededor de 65 años, realmente ya no le importa mucho todo eso, gracias al afectuoso apoyo de su esposa e hijos.
Señala que no es responsable de ninguno de los certificados de nacimiento.
"Somos quienes nos dicen que somos", dice.
Esto es lo que sabe: su madre, María Bulnes, creció en Cuba y se casó con un general del ejército. Su familia era dueña de un hotel importante, el Chateau Miramar. Después de divorciarse, abandonó la isla en secreto en agosto de 1959, poco después del triunfo de la revolución cubana. Según lo que le ha contado la familia, recibio la ayuda del Senador de los Estados Unidos por Florida, George Smathers, y un banquero exiliado cubano, Charles 'Bebe' Rebozo, que tenía estrechos vínculos con quien entonces era un congresista estadounidense y posteriormente se convertiría en presidente de Estados Unidos, Richard Nixon.
Cervera asegura que tiene la intención de arreglar su identidad en un aspecto crucial.
" Lo que más quiero jurar como ciudadano estadounidense legal. Eso es lo que estoy acostumbrado a ser. Nada más importa en lo que a mí respecta", añadió.
Dudas sobre su identidad
Cervera y su madre se enemistaron en 1973 cuando él tenía 16 años, se fue de casa y nunca regresó. Dice que después de descubrir su verdadero certificado de nacimiento, comenzó a tener dudas sobre su identidad, incluyendo quiénes eran sus verdaderos padres.
Más tarde supo por familiares en Cuba que fue adoptado, pero nadie estaba seguro de cuándo ni dónde nació.
"Su madre era muy reservada", dijo Bernadette. Después de casarse con Cervera, su hermana le confió a Bernadette que él fue adoptado en Nueva York y que sus verdaderos padres, un alemán y una actriz estadounidense, habían muerto en un accidente automovilístico.
Su madre afirmó que su fecha de nacimiento, el 24 de diciembre, "fue un regalo de Navidad para ella", dijo.
Encontraron registros de viaje que indicaban que ella había viajado a Nueva York en esa época. Las autoridades estatales le enviaron un acta de nacimiento a nombre de José Ramón Cervera, pero con fecha de nacimiento en septiembre de 1956. "Estábamos emocionados", dijo.
Pero cuando buscaron más detalles del certificado de nacimiento, incluyendo los nombres de familiares en Tampa, descubrieron que José Ramón Cervera estaba muerto.
Cuando consultó con las autoridades en Puerto Rico, la cosa no mejoró. Les envió una copia de su acta de nacimiento en la que constaba que nació en Yauco en la costa sur. Pero las autoridades respondieron diciendo que no había constancia de su nacimiento. Además, debido a problemas de fraude de identidad, el gobierno estadounidense declaró en 2010 que ya no aceptaría certificados de nacimiento puertorriqueños emitidos antes del 1 de julio de 2010 como prueba de ciudadanía estadounidense.
Cervera se puso en contacto con las autoridades cubanas y se le emitió un documento de registro civil de Punta Brava, en las afueras de la Habana, aspecto raro con fecha de mayo de 1960, en el que se indicaba que su nacimiento en la Nochebuena de 1956 había sido registrado oficialmente varios meses después, el 6 de marzo de 1957. Y lo que es más raro aún, decía que sus padres, José Cervera Bahamonde y María Bulnes Sordia, eran "naturales de Sao Paulo, Brasil".
Utilizando su ADN, se puso en contacto con un experto en ascendencia cubana. Ahora parece que su padre pudo haber sido Yndalecio Ángel Alejándrez Peña, un difunto explayboy cubano.
Ahora que se le acaba el tiempo, Cervera dice que le preocupa no poder renovar su licencia de conducir de Florida y ya no podrá tomar vuelos nacionales o ni siquiera ingresar a un edificio federal.
Un error
Desesperado, Cervera recurrió a la abogada de inmigración Elizabeth Ricci, pensando que podría ser deportado o puesto en detención migratoria.
Ella dice que la denegación de su solicitud de naturalización fue un error y que su historial de votaciones no debería excluirlo de la ciudadanía.
"Fue estúpido. Pero hay que entender su estado anímico. Se sentía estadounidense", dijo Ricci, quien representa a Cervera pro bono.
Cuando solicitó la naturalización, fue rechazado por falta de "buen carácter moral" por haber votado ilegalmente.
De hecho, Ricci alega que nada en la ley requiere que alguien que solicita la ciudadanía y que haya servido honorablemente en el ejército demuestre un período de buen carácter moral.
Dijo que los funcionarios de inmigración se basaron en una cláusula de la Ley de Inmigración y Nacionalidad, que exige que los solicitantes militares tengan un buen carácter moral "durante al menos un año antes de presentar la solicitud de naturalización".
Pero Ricci dice que Cervera nunca fue acusado ni condenado por haberse registrado ilegalmente para votar o haber votado.
"Lo único de lo que se ha acusado a Cervera fue de pescar con una licencia que se le retiró", dijo Ricci y añadió que dado que el voto ilegal de Cervera fue hace más de nueve años, su solicitud no debería haber sido rechazada.
"No es ideal. Es lo que hay. Pero prestó servicio durante Vietnam. Así que vamos a solucionarlo", añadió.