Una hispana y sus cuatro hijos sufren los efectos del coronavirus, pero siguen sin creer en la vacuna

SAN ANTONIO, Texas. - Una madre y sus cuatro hijos, no vacunados, fueron diagnosticados con coronavirus en medio del alza de contagios en todo el país y cuya variante delta está provocando estragos en el sistema hospitalario de la ciudad de San Antonio.

Sandra Ortiz logró sobrevivir al covid-19 junto a todos sus hijos. Esto pese a que su hija menor, de 8 años, tuvo una fiebre de 104.5 grados y ella presentó problemas para respirar y tuvo que ser encamada por un tiempo.

Ortiz reconoce que ella sí cree sobre la existencia del coronavirus, sin embargo, era "incrédula sobre el contagio del covid-19" y no usaba mascarilla. "No usábamos mascarillas y yo era incrédula de que se pegue el covid-19", dijo aún cuando ella y todos los menores presentaron síntomas por coronavirus.

Sin embargo, la opinión de Ortiz sobre el no vacunarse es la misma. "La verdad que dudo que eso de vacunarse sirva para algo porque yo conozco gente que se vacunaron y murieron", dijo Ortiz aunque los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades han dicho que la evidencia científica señala que la vacuna puede evitar el desarrollo de fuertes síntomas y hasta la muerte.

Estancada la tasa de vacunación en San Antonio

La lucha de las autoridades locales en San Antonio para que las personas se vacunen contra el coronavirus continúa. Desde hace unas cuatro semanas la tasa de vacunación está estancada. Actualmente, 65.9% de los habitantes de la ciudad de 12 años o más han sido inoculados.

Los casos de contagios diarios reportados por el Distrito de Salud Metropolitano de la Ciudad de San Antonio ya han superado el promedio de contagio semanal. Mientras, los hospitales reciben a más menores de edad durante esta cuarta ola del virus. De hecho, en San Antonio 24 de los 209 pacientes ingresados al hospital el martes eran niños.

Seguridad de las vacunas contra el covid-19

Los CDC recomiendan que las personas se vacunen contra el COVID-19 lo antes posible debido a seguridad y efectividad.

Entre el 14 diciembre del 2020 y el 16 de agosto del 2021 se han administrado más de 357 millones de dosis de la vacuna contra el COVID-19 en los Estados Unidos, según los datos de la dependencia federal.

Aunque algunas personas han reportado efectos secundarios luego de ser inoculados, las autoridades de salud indican que entre ellos se encuentran hinchazón, enrojecimiento y dolor en el lugar de la inyección, fiebre, dolor de cabeza, cansancio, dolor muscular, escalofríos y náuseas, son signos normales de que su organismo está generando protección, indican los expertos.

"Es muy poco probable que después de recibir cualquier vacuna, incluida la vacuna contra el covid-19, se produzcan efectos secundarios graves que causen un problema de salud a largo plazo", lee unas declaraciones de los CDC.

Asimismo, han detallado que, hasta la fecha, los sistemas implementados para monitorear la seguridad de las vacunas han detectado solo dos tipos de problemas de salud graves después de la vacunación, ambos poco frecuentes. Estos son la anafilaxia y el síndrome de trombosis-trombocitopenia.