HARRISBURG, PA- Pensilvania alcanzó un hito sombrío el miércoles, convirtiéndose en el octavo estado del país en superar más de un millón de casos de coronavirus.

Los datos del Departamento de Salud muestran que Pensilvania tiene actualmente 1,001,913 casos y 24,924 muertes relacionadas con coronavirus hasta el miércoles.

El Departamento de Salud informó otros 4,667 casos nuevos, el número más alto en un solo día desde principios de febrero, para llevar a Pensilvania a unos pocos cientos del hito. Las infecciones diarias han aumentado más del 10% en dos semanas, y las hospitalizaciones también han comenzado a aumentar.

El anuncio se produce cuando Pensilvania planifica revertir las restricciones de coronavirus el 4 de abril, con aperturas más amplias de restaurantes, bares y grandes lugares.

Filadelfia, que ha tenido el mayor número de casos y muertes por coronavirus en Pensilvania, no seguirá los pasos del estado.

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El secretario de Salud, Dr. Thomas Farley, dijo que el recuento de casos y el número de habitantes de Filadelfia vacunados hasta ahora no son lo suficientemente buenos para igualar los planes de reapertura del estado.

Menos vacunas para el estado

Con los funcionarios de salud en alerta, Pensilvania se enteró de que no recibirá tantas dosis nuevas de la vacuna Johnson & Johnson como proyectó inicialmente el gobierno federal. El estado confirmó que recibirá unas 66.000 dosis la próxima semana, no 200.000.

Pensilvania ha utilizado su asignación federal de la vacuna de inyección única para inocular a más de 100.000 educadores. Los funcionarios estatales planeaban utilizar las asignaciones futuras de Johnson & Johnson en los sitios regionales de vacunación masiva, al tiempo que reservaban dosis para clínicas especiales para policías y bomberos, trabajadores de supermercados y personas en los sectores de procesamiento de carne y agricultura.

Los sitios regionales administrados por el estado todavía están en proceso, pero las poblaciones objetivo ahora serán vacunadas a través de un programa federal separado que envía la vacuna Johnson & Johnson directamente a las farmacias minoristas, según la oficina del gobernador, que calificó la asignación estatal reducida como un pequeño bache en el camino.

"Como hemos aprendido durante el lanzamiento, las proyecciones nunca son promesas", dijo Lyndsay Kensinger, portavoz del gobernador Tom Wolf.

"Si bien esto cambiará algunos de los planes de distribución", dijo, "no anticipamos una interrupción en el ritmo acelerado de los disparos en las armas".

Wolf promocionó las estadísticas federales que muestran que Pensilvania, después de los primeros tropiezos, se ha vuelto más eficiente para vacunar a sus residentes.

Más eficiente

Pensilvania se encuentra ahora en el puesto 17 entre los estados en el porcentaje de su población que ha recibido al menos una dosis, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE. UU. Eso es más que el número 30 hace un mes, cuando la administración de Wolf ordenó a los proveedores que dispararan más rápidamente. Más de 3 millones de personas han recibido al menos una dosis.

"Este es un progreso tremendo", expresó Wolf.

Pero sigue habiendo una frustración significativa entre otros residentes elegibles, personas de 65 años o más y personas más jóvenes con afecciones médicas de alto riesgo, que han esperado meses para recibir una vacuna mientras navegan por el confuso y disperso sistema de registro del estado.

Si bien algunas estadísticas federales muestran una mejora en el lanzamiento de vacunas en el estado, otras son menos favorables. Pensilvania, por ejemplo, ocupa el puesto 46 entre los estados en porcentaje de personas mayores de 65 años completamente vacunadas.