Una enfermera, un médico y un DJ, los rostros del dolor que deja el coronavirus en el sur de Florida

También perdieron la batalla contra el covid-19, un oficial del Sheriff de Broward y un voluntario de diversas causas. Miami-Dade, Broward y Monroe suman 113 muertes por el virus.

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Aunque la mayoría de aquellos que contraen el coronavirus pueden recuperarse y seguir adelante con sus vidas, muchos no logran ganarle la batalla a esta enfermedad. Y el sur de Florida no ha sido ajeno a la tragedia, por la que ya se cuentan 113 víctimas fatales en los condados Miami-Dade, Broward y Monroe.

A algunos de ellos, sus familiares, amigos o colegas, les han hecho sentidos homenajes en las redes sociales, dándole un rostro al dolor de la pandemia del covid-19.

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Es el caso de Israel Carreras, un cubano de 40 años, quien fue la primera víctima fatal del coronavirus en Miami-Dade. Carreras era médico radiólogo y trabajaba también conduciendo para Uber y Lyft.

El hombre estuvo en el Winter Party Festival en Miami Beach, encuentro en el que al parecer se contagiaron varias personas, cuando apenas comenzaba la emergencia en Florida. Sin embargo, no es claro donde se contagió.


La enfermera de cuidados intensivos, Araceli Buendía, quien trabajaba en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Jackson Memorial, fue otra de las primeras víctimas fatales del covid-19 en Miami-Dade.

Araceli estuvo más de 30 años atendiendo a los enfermos en estado más crítico en el hospital. “Los profesionales de la salud como ella, son los verdaderos héroes de esta batalla”, dijo el centro médico en un comunicado.

También perdió la vida el reconocido DJ, Griff Gotti, quien se presentaba regularmente en uno de los restaurantes más populares de Miami Beach. “Les imploro que estén muy vigilantes con su salud estos días”, dijo en sus redes sociales cuando todavía batallaba contra la enfermedad.

La segunda víctima del coronavirus que estuvo en el Winter Festival, fue Ron Rich, un voluntario de una organización LGBT Task Force y otras causas. “Lo extrañaremos. Su gran sonrisa y calidez lo tenían principalmente en nuestro equipo de hospitalidad”, dijo la organización.

Por último, el oficial de la Oficina del Sheriff de Broward, Shannon Bennet, murió por complicaciones relacionadas con el coronavirus, a los 39 años, tras 12 años sirviendo en la fuerza pública.

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“Su legado seguirá vivo en nuestro desempeño”, dijo el Sheriff Gregory Tony.

Israel, Araceli, Griiff, Ron y Shannon, nombres que se lleva una pandemia, pero que quedan grabados para siempre, en los corazones de quienes los conocieron, de quienes los amaron.

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