Republicanos texanos apoyan a la peluquera encarcelada por negarse a cerrar su negocio

Líderes republicanos de Texas han defendido este miércoles a Shelley Luther, propietaria de un salón de belleza en Dallas, que fue condenada a siete días de cárcel y el pago de una multa por negarse a cerrar su negocio en medio de las medidas de restricción para evitar el contagio del coronavirus.

En la audiencia del 5 de mayo, un juez estatal dijo a Luther que, de disculparse, evitaría ir a prisión. Ella se negó. El gobernador Greg Abbott, que inició la reapertura del estado el pasado viernes 1 de mayo, dijo que la sentencia contra Luther era “excesiva” y añadió que “encarcelar a los texanos por no cumplir con órdenes ejecutivas debe ser la última opción”, según explicó este miércoles en rueda de prensa.

“Es importante el cumplimiento de las órdenes durante esta pandemia”, dijo Abbott, que decretó una de las órdenes desafiadas por Luther. “No obstante, hay castigos menos duros que encarcelar a una madre texana”.

El fiscal general Ken Paxton, también republicano, pidió que se libere a Luther mientras que el vicegobernador Dan Patrick se ofreció a pagar los $7,000 dólares de fianza que impuso el juez para que Luther pueda cumplir el resto de su condena en arresto domiciliario.

Otros de los conservadores que han mostrado su apoyo son el senador Ted Cruz y los congresistas Dan Crenshaw (del distrito 2, Houston) y Chip Roy (del distrito 21, San Antonio-Austin). Un grupo de personas, además, protestó este miércoles en Dallas.
Roy dijo que la condena contra Luther (con quien habló personalmente con ella) era “terrible”.

Decisión polémica

“No debería de haberse producido una condena de siete días de cárcel contra una mujer que solo quiere abrir su negocio para sostener a su familia”, dijo el representante al Texas Tribune.

El episodio ilustra el debate que ha centrado la política texana en estos días. Abbott, por ejemplo, ha enfrentado críticas tanto de los demócratas que aseguran que su plan de reapertura es demasiado apresurado como de los republicanos que dicen que es muy lento.

El salón de belleza de Luther fue obligado a cerrar a finales de marzo debido a las medidas de restricción para evitar el contagio del coronavirus. Luther abrió de nuevo el negocio el 24 de abril y se negó a obedecer la orden emitida por las autoridades de Dallas. El pasado 28 de abril fue obligada de nuevo a cerrar y por ello enfrentó la audiencia de este martes.

La propietaria se negó a disculparse, lo que el juez pedía para evitar enviarla a la cárcel. “Alimentar a mis hijos no es egoísta”, dijo en la audiencia, que se transmitió en YouTube. “Si usted cree que la ley es más importante que alimentar a niños, entonces siga adelante con su decisión. Yo no voy a cerrar el salón”. Un GoFundMe para ayudar a la mujer ha recaudado $325,000 dólares en las últimas 24 horas.

Texas ha registrado más de 32,000 casos de coronavirus y al menos han muerto 884 personas. Solamente en el último día se diagnosticaron mil más.