Los habitantes de Bélgica son personas caracterizadas por el buen gusto y un vibrante sentido del humor. Manifestaciones turísticas de este hecho son la existencia de la famosa ciudad de Brujas, el Museo de las Papas Fritas, los murales con figuras de cómic nacionales regados por todo Bruselas. Sin duda los monumentos en Bruselas no están exentos de esta regla y revelan un profundo atractivo artístico, turístico e histórico en su faceta más inteligente.
Los dos más importantes monumentos en Bruselas son el Manneken Pie y el Atomium. Estos dos elementos son ni más ni menos que una fuente con una pequeña estatua de un niño haciendo pis y un modelo de molécula lo suficientemente grande como para albergar restaurantes, galerías de arte y tiendas. Estos dos monumentos son característicos de Bruselas y la gran mayoría de los souvenires de la ciudad cuentan con referencias a estos emblemas.
Manneken Pie, en la Rue de L'Etuve, es el más popular entre los monumentos en Bruselas y el más querido por los habitantes locales. La escultura del niño haciendo pis fue instalada, en su versión original, en el sitio donde aún permanece en el año 1619. Sin embargo, fue objeto de daños y destrucciones en repetidas ocasiones que siempre fueron sucedidas por sus correspondientes restauraciones.
Por su parte, el Atomium es una de las imágenes más famosas del país. Creado en 1958 para la World Exhibition por el ingeniero Andre Waterkeyn, es un modelo de molécula realizado en hierro cristal a una escala de 165 billones. Abarca nueves esferas gigantes que simbolizan las provincias belgas, conectadas por una red de corredores y un ascensor de alta velocidad. El Atomium alcanza una altura máxima de 102 m.
Otros interesantes monumentos en Bruselas son el Memorial Anglo Belga (Plaza Poelaert), que recuerda a los héroes que cooperaron con Gran Bretaña durante la I Guerra Mundial, y el Congreszuil (Plaza del Congreso), una columna de 75 metros de alto inaugurada en 1850 y diseñada por Joseph Poelaert, quien también crearía luego el Palais de Justice.
Entre los monumentos en Bruselas también se cuenta la Casa de Erasmo de Rótterdam ( Rue du Chapitre, 31). En la casa donde Desiderius Erasmus Roterodamus residió en la capital belga por casi medio año, funciona actualmente un museo que exhibe gran parte del legado del Príncipe de los Humanistas. Asimismo, en la Gran Plaza se encuentra el monumento dorado a Evrard 't Serclaes, héroe legendario que lideró la rebelión que exigía la independencia de Bruselas del Conde de Flandes.