Aunque los fuertes vientos han disminuido, aún se registran algunas leves emergencias que han obligado al cierre de algunas calles. Como medida de seguridad, las playas se encuentran cerradas.

El más reciente informe de las autoridades revela, también, que se adelantan trabajos conjuntos con varias organizaciones para ofrecer ayudas a las personas damnificadas por el fenómeno natural.

La alerta estará en efecto hasta el lunes en la noche, por esto, las autoridades piden a la comunidad que se tomen las medidas de seguridad correspondiente. Oficiales locales creen que el nivel de agua podría aumentar a 21 pies.

El gobernador Greg Abbott indicó que se han declarado 50 condados como área de desastre, anunció una proclamación de ayuda a personas en el estado y aseguró que unos 1800 militares van a ser activados para ayudar durante y después del fenómeno meteorológico.

Debido al desplazamiento de Harvey, las embarcaciones no podrán llegar a los puertos de Houston y Galveston y tuvieron que ser desviados a otras localidades. La compañía que operan los cruceros aseguró que sea realizarán rembolsos por lo sucedido.

Postes eléctricos, estaciones de gasolina, calles, entre otros, se han visto afectados por la fuerza de los vientos provocados por el huracán Harvey. Hasta el momento no hay reporte de personas lesionadas.