Tener un resfriado es algo común. Nosotros, los adultos, podemos llevarlo lo más bien y curarnos sin ningún tipo de problema. Sin embargo, cuando se trata de los niños, ahí la cosa cambia, pues comienzan a surgir consejos de alguna abuela, tía o vecina que nos asegura que ella tiene toda la verdad acerca de los resfriados. Lo cierto es que a veces estas verdades sobre los resfriados son simples mitos que ahora desmentiremos. ¡Sigue leyendo!

Resfriarse en la oficina es lo peor: entre los estornudos, la congestión nasal y la carraspera, las actividades se hacen eternas y más complicadas de lo normal. Pero lo peor de todo son las miradas de odio de tus compañeros y el hecho de no poder trabajar desde casa porque no estás lo “suficientemente” enfermo.

¡Que no te tome por sorpresa!

Los cambios de clima vienen acompañados de tos y resfríos molestos que perjudican nuestra salud, y resultan muy desagradables.

Goteo nasal, congestión, dolor de garganta, estornudos; parece que has pescado un resfriado. Si bien los síntomas del resfriado varían (y también pueden incluir dolores de cabeza y fiebre), todos los resfriados son infecciones respiratorias causadas por más de 200 virus posibles. Con tantos virus rondando, otra forma de pensar en ello es que un resfriado es causado por un sistema inmune débil, lo que permite que el virus ataque. Y aunque no existe una cura mágica, sí hay algunos alimentos extraños para combatir el resfriado que no conocías ¡y te sorprenderán!

La cúrcuma es una especia que se utiliza con gran asiduidad en la cocina hindú, pues le brinda un gran sabor y colorido a muchos de sus platos tradicionales. En algunas investigaciones, se llegó a la conclusión de que este condimento mezclado con otros ingredientes para formar la leche de cúrcuma, era perfecto para liberar al organismo de resfríos, gripes y otro tipo de trastornos propios de los climas invernales. Si deseas aprender cómo se hace, no dejes de leer la receta aquí, en Otra Medicina.