Soy de la generación en la que maquillarse con gloss era lo más in. Veo con mucho agrado que esta moda volvió y que los gurús del maquillaje la están implementando.

Esta técnica de maquillaje de ojos ya tiene algunas temporadas apareciendo en pasarelas nacionales e internacionales de las más reconocidas celebrities. ¿De qué se trata? La clave está en aplicar sombras sin bordes precisos, simulando un aspecto descuidado que podríamos traducir al castellano como «ojos manchados».

Siendo una adolescente despreocupada y sin problemas, descubrí al mirarme al espejo que tenía un párpado más grande que el otro. No era una diferencia que se veía a simple vista, pero yo la notaba ¡y no podía dejar de mirarlo!

Típico: estás en tu casa viendo una película o leyendo un libro, llevas ropa cómoda y estás descansando. De repente suena tu celular y son tus amigas para invitarte a un plan de último momento. Rápidamente te levantas y comienzas a buscar qué ponerte, pues en un rato pasarán por ti para irse de fiesta.

No existe mayor vergüenza que salir a la carrera de tu casa por la mañana y darte cuenta en el camión que traes zapatos diferentes. ¡Trágame, tierra! Verse descoordinada es lo peor que podría pasarte.

Con un par de truquitos con el delineador es posible cambiar por completo tu mirada, dependiendo de la intención que quieras darles ese día. Tal vez algo más suave y romántico, o intenso y atrevido.